El Vaticano abre la causa de beatificación de la fundadora de las Oblatas de Cristo Sacerdote, las monjas que rezan 24 horas

  • Las religiosas dedican dos horas diarias a orar por la “santificación de los sacerdotes”
  • “A los seminaristas les ayuda mucho saber que hay una hermana rezando por ellos siempre”, ha dicho la superiora

oblatas-claustro

La Congregación para las Causas de los Santos ha abierto las actas diocesanas de la causa de beatificación y canonización de la Sierva de Dios María del Carmen Hidalgo de Caviedes, religiosa fundadora de las Hermanas Oblatas de Cristo Sacerdote, y a quien se debe, precisamente, la festividad de Cristo Sacerdote.

Con la apertura de las actas diocesanas se inicia un proceso que pasa por el estudio de la validez jurídica de las actas, la designación de un relator para la elaboración de lapositio’, lo cual exige la presentación de testimonios y documentos para probar el ejercicio heroico de cada una de las virtudes teologales, cardinales y anexas, así como la fama de santidad y de signos por parte de la Sierva de Dios.

La comunidad de religiosas de vida contemplativa Oblatas de Cristo Sacerdote realizan, desde la fundación de su convento en la localidad valenciana de Moncada hace 44 años, turnos de oración continuos de una hora por la mañana y otra por la noche, ante el sagrario, las 24 horas del día, todo el año, para orar por la “santificación de los sacerdotes”.

Entrega y oración

El objetivo de esta congregación, por carisma, es que “siempre haya una hermana actualizando la entrega y la oración, por los sacerdotes, haga frío o calor, porque siempre hay alguno de ellos necesitado de oración, que puede estar en dificultad, alguien que nos necesita, como si fuera las farmacias de guardia o los médicos de urgencias en un hospital”, ha dicho la superiora, Mercedes González. 

Para realizar cada cambio de turno, “entra la hermana que va a relevar a la que está rezando y se arrodillan ambas, en el centro de la capilla, se postran ante el sagrario y decimos ‘Padre Santo, por Cristo, con Cristo y en Cristo Sacerdote, por ellos ruego, porque son tuyos, santifícalos en la Verdad. Madre de Cristo sacerdote, ruega por nosotros”, ha explicado la superiora.

Las oblatas de Cristo Sacerdote mantienen permanentemente encendida por la noche la cruz que corona su convento, cercano al Seminario Metropolitano de Moncada, “y los seminaristas nos comentan que les ayuda mucho ver la luz encendida porque les recuerda que hay una hermana rezando por ellos siempre, y eso es para ellos todo un signo y un estímulo, según nos dicen”, explica González.

Ofrecer la vida por los sacerdotes

En julio de 1936, cuando apenas tenía 23 años y apenas comenzaba la Guerra Civil, María del Carmen Hidalgo, después de comprender el significado y la necesidad urgente del sacerdote para poder celebrar la Eucaristía y llegar a las almas, sintió la llamada de ofrecer su vida por los sacerdotes y las vocaciones.

Así, en 1938, fundó en Madrid – junto al venerable José María García Lahiguera – la congregación de las Hermanas Oblatas de Cristo Sacerdote. Sin embargo, no fue aprobada por la Santa Sede hasta 1967. 

Noticias relacionadas
Compartir