“Venid y Veréis”

Muchos de los que hemos tenido la suerte de encontrarnos “con el amor de Dios que se convierte en feliz amistad” y que nos ha hecho “alcanzar nuestro ser más verdadero” no podemos más que anunciarlo, “ahí está el manantial de la acción evangelizadora porque, ‘si alguien ha acogido ese amor que le devuelve el sentido de la vida, ¿cómo puede contener el deseo de comunicarlo a otros?” así lo afirma el papa Francisco en ‘Evangelii gaudium’, 8.

Este amor apostólico es el que nos ha impulsado a un grupo de maestros, pedagogos y teólogos procedentes de contextos parroquiales, escolares y universitarios, a unirnos motivados y apoyados por la editorial PPC para elaborar el proyecto ‘Venid y Veréis’. Está siendo una auténtica experiencia sinodal de colaboración entre laicos, sacerdotes y religiosos, que se ha iniciado con el libro ‘Venid y Veréis I’ y que esperemos sea el primero de una serie que ayude a descubrir y profundizar la experiencia de encuentro con Cristo: “Fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con Él aquel día” Juan 1, 35-42.

Casi traicionamos el mismo método al tratarlo de explicar, pues solo se entenderá plenamente cuando se experimente. Pero tratemos de trazar algunas líneas que por lo menos lo esbocen:

Venid y Veréis ofrece itinerarios de iniciación o profundización en la fe desde la experiencia espiritual por medio de la inmersión en Historias inspiradas en la Biblia y en el Catecismo de la Iglesia Católica utilizando una metodología inspirada en la pedagogía de María Montessori.
Venid y Veréis es una oportunidad para que niños, adolescentes, jóvenes y adultos, vivan un encuentro y amistad con el Dios de la Alianza en su Palabra y en la tradición de la Iglesia; adaptable a diferentes contextos: familiar o en comunidad, grupo de fe, parroquias, colegios o movimientos cristianos.
Venid y Veréis es una propuesta pastoral que trata de recuperar la transmisión de la fe por medio de la narración de historias, de hondas raíces bíblicas y culturales. El ser humano de todos los tiempos aprende, comprende y se comprende narrando historias. Las historias posibilitan al oyente actual hacer la misma experiencia espiritual del actuar salvador del Dios de la Alianza.
Venid y Veréis se une así a la llamada a realizar una acción evangelizadora “kerygmática y mistagógica” [EG 163-168; ‘Christus vivit’ 222-223]; por ello proponemos la profundización en las fuentes de la revelación, Biblia y Tradición, en donde se hace “presente y fecundo todo el misterio de Cristo” [Nuevo Directorio de Catequesis, 25]. Ordenados según los “cuatro pilares” que configuran todo proceso de crecimiento en la fe: la profesión de la fe bautismal, los Sacramentos, la vida en el Espíritu y la oración del creyente (Cf. CEC 13).
Venid y Veréis sueña con posibilitar esa misma experiencia espiritual que fundó la familia de creyentes que constituimos la Iglesia. Por esa razón el logotipo del proyecto representa una iglesia cuya puerta son dos páginas de libros que constituyen (Biblia y Tradición). El mismo Espíritu que inspiró estos relatos es que el suscita la experiencia espiritual de los creyentes.
Venid y veréis quiere hacer partícipe de la Alianza que Dios con el ser humano, al que creó a su “imagen y semejanza” (Génesis 1,26) y para el que desplegó el universo como escenario de este vínculo (Génesis 1,1-2,4). La Alianza parte de una elección gratuita de Dios que conlleva una promesa de vida para cada persona, la sociedad y la entera creación. La Alianza se ha realizado plenamente en Jesús, el Hijo Amado, y se nos ofrece en su mismo Espíritu para vivirla en la comunidad de la Nueva Alianza que es la Iglesia, y nos compromete para desarrollar en el Mundo su realización plena en una “fraternidad universal”. Este eje trasversal del proyecto está representado por el arcoíris, símbolo de la “Alianza perpetua entre Dios y toda alma viviente” (Génesis 9, 16).

Hemos encontrado en la pedagogía de María Montessori el canal adecuado para que esta doble fuente de la revelación, Biblia y Tradición favorezca este encuentro con el Dios de la Alianza. Para esta educadora cristiana del siglo XX, el educador, sea en la familia, en la parroquia o en la escuela, está llamado a ser instrumento de Dios: “la educación de la vida física y psíquica no es más que la colaboración con las fuerzas naturales de desarrollo, también la educación sobrenatural no es otra cosa que la colaboración con la Gracia de Dios”. Aunque tiene tres libros que podríamos denominar catequéticas, ‘El niño en la Iglesia’ (1929), ‘La vida en Jesucristo’ (1931), y ‘La misa vivida por los niños’ (1934), en toda su obra podemos descubrir un pensamiento pedagógico cristiano que ha inspirado la didáctica de “Venid y Veréis” que exponemos a continuación brevemente:

El ambiente preparado es uno de los elementos más importantes de esta pedagogía, debe ser un espacio atractivo y adaptado a cada edad y sensibilidad. Montessori insiste en el contexto y en los materiales que se adecuan a la vida espiritual del niño, a encontrarse con Dios.
Los materiales didácticos son sencillos, esenciales y figurativos que deja espacio a la creatividad del niño y permite que sea él quien complete con su imaginación la historia escuchada. Nuestros artistas han escrutado los tesoros de la Palabra de Dios y de la Tradición y, más que ofrecer conceptos abstractos, buscan inducir a la oración, a una experiencia espiritual y personal de encuentro con el Dios de la Alianza.
En los diferentes relatos podemos descubrir que se utilizan muchos de los símbolos y gestos presentes en el texto Sagrado y en la Tradición de la Iglesia con el fin de introducir en la experiencia del misterio. Como afirmaba María Montessori “la liturgia es la pedagogía de la Iglesia”.
El educador como acompañante del proceso de crecimiento, en este caso, en la fe y en el desarrollo de la espiritualidad. Por ello prepara con esmero y cuidado los encuentros, al mismo tiempo que las evalúa para aprender y seguir mejorando.
Cada encuentro está bien secuenciado, dejando solo al Espíritu y al niño espacio para la improvisación. Como toda celebración en la Iglesia hay un momento de ritos de bienvenida, tras la cual comienza lo que podríamos llamar una ‘Lectio Divina’ donde la ‘lectura’ se realiza por la narración de la historia, la meditación por medio de reflexión de preguntas en grupo y de expresión artística personal, para terminar con un momento de oración en grupo expresando libremente lo que ha resonado en nuestro corazón.

Hemos descrito con brevedad un proyecto que podréis seguir profundizando en https://es.ppc-editorial.com/venidyvereis y si queréis ver la presentación https://youtu.be/R_CyeZUOJIQ Además podéis experimentarlo junto a otros en cada vez más parroquias y colegios.