Tribuna

Don Mario Riboldi, el sacerdote que se hizo gitano 

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En el ‘Anuario Pontificio’ aparecía como Mons. Riboldi, pero en los campamentos gitanos era conocido como Don Mario. De hecho, vestido siempre de negro, con un sombrero, un bigote y un cayado, era uno más entre los gitanos.



Tal era el sacerdote italiano Mario Riboldi, oficialmente incardinado en la Archidiócesis de Milán desde 1952 pero en realidad domiciliado en su ‘roulotte’-capilla, donde pasó su vida junto a los gitanos, aprendiendo su lengua y conociendo sus costumbres.

Inculturar el Evangelio

Su vida transcurrió encarnándose entre los gitanos e inculturando el Evangelio. Con ellos viajó por toda Europa, alojándose en campamentos de todas las periferias y compartiendo el día a día, con sus alegrías y sus sinsabores.

Don Mario Riboldi junto a su caravana

Don Mario Riboldi junto a su caravana, convertida en hogar y capilla

Fruto de su amistad con su ordinario el cardenal Montini, posteriormente papa Pablo VI, fue la primera peregrinación internacional a Pomezia, en 1965. Era aquella la generación de Jordi García-Díe, Bruno Nicolini y André Barthélemy, con su predecesor Pedro Closa.

Traducir el Evangelio a su lengua, explicarlo en categorías culturalmente gitanas, inculturar la liturgia y ganarse su confianza fueron sus claves pastorales, que compartió con otros dos compañeros.

Beatificación de ‘El Pelé’

Fue uno de los impulsores de las peregrinaciones internacionales a Saintes-Maries-de-la-Mer y de los encuentros internacionales del Comité Catholique International pour les Tsiganes. Para vergüenza nuestra, fue él quien impulsó la beatificación de Ceferino Giménez Malla, ‘El Pelé’.

El pasado 8 de junio falleció, a los 92 años, en una residencia cerca de Como. Pero “el tío Mario” seguirá viviendo en los corazones de los gitanos de media Europa, pueblo en el que él supo ver la única población de nuestro continente en la que todavía no rige el egoísmo, causa fundamental de su exclusión de la sociedad mayoritaria.

Desde el cielo continuará sin duda trabajando con ellos.