Sor Lucía Caram, dominica argentina afincada en Manresa y directora de la Fundación del Convento de Santa Clara, ha sido distinguida este jueves en Madrid con la Orden de la Princesa Olga. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, le entregó personalmente la condecoración “por su atención a Ucrania” en medio de la guerra.
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Desde el inicio de la invasión rusa, la religiosa ha visitado el país más de 40 veces, convirtiéndose en uno de los rostros visibles del apoyo humanitario español al pueblo ucraniano. “En cada ocasión, lleva consigo oración, apoyo a nuestros soldados heridos y ayuda humanitaria para nuestro pueblo”, reconoció Zelenski en X (anteriormente Twitter).
Gracias a la colaboración con su fundación, Ucrania ha recibido “vehículos, medicamentos, generadores, mantas, equipo quirúrgico, un hospital móvil y ambulancias con cuidados intensivos”. La red solidaria impulsada por Caram ha movilizado recursos, voluntarios y respaldo logístico para enviar ayuda a zonas especialmente castigadas por la guerra.
Sister María Lucía Caram Padilla, Director of the Santa Clara Convent Foundation, has visited Ukraine more than 40 times since the very beginning of Russia’s aggression. Each time, she brings prayer, support for our wounded warriors, and humanitarian aid for our people. Thanks to… pic.twitter.com/IsiUJXmWa6
— Volodymyr Zelenskyy / Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) November 18, 2025
Compromiso humano y espiritual
El presidente ucraniano expresó su gratitud no solo por la ayuda concreta, sino por el compromiso humano y espiritual de la religiosa: “Siempre estaremos agradecidos a todos aquellos que no permanecen indiferentes ante nuestra lucha y ayudan a Ucrania a proteger a su pueblo: líderes espirituales, figuras de la sociedad civil, políticos, empresarios. ¡Gracias!”
La Orden de la Princesa Olga es una de las máximas distinciones del Estado ucraniano a mujeres por sus méritos en los ámbitos social, cultural o humanitario. Caram se suma así a la lista de personalidades extranjeras que han sido reconocidas por su solidaridad con Ucrania en uno de los momentos más difíciles de su historia reciente.
