En la Aula del Sínodo, el papa León XIV ha recibido este viernes 24 de octubre a los superiores mayores de la Compañía de Jesús, a quienes dirigió un discurso centrado en la misión de los jesuitas en los tiempos actuales. “Vivimos un cambio de época, un tiempo marcado por transformaciones rápidas en la cultura, la economía, la tecnología y la política”, comenzó el Pontífice, advirtiendo que “la inteligencia artificial y otras innovaciones están remodelando nuestra comprensión del trabajo, de las relaciones e incluso de la identidad humana”.
- WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
El Papa reconoció también que “el deterioro ecológico amenaza nuestra casa común, los sistemas políticos no responden al grito de los pobres y el populismo y la polarización ideológica profundizan las divisiones entre naciones”. Pero, frente a esto, recordó que “en este mundo, Cristo sigue enviando a sus discípulos”.
“La Iglesia los necesita en las fronteras —geográficas, culturales, intelectuales o espirituales— donde las viejas rutas ya no bastan”, subrayó León XIV. “Como san Ignacio y los mártires jesuitas que lo siguieron, están llamados a discernir, innovar y confiar en Cristo, con la verdad ceñida al cuerpo y la justicia como coraza”.
El discernimiento en tiempos de cambio
León XIV agradeció a los jesuitas por su contribución al proceso sinodal, calificándolo como una de las “principales fronteras de la Iglesia actual”. “El camino sinodal nos llama a escuchar más profundamente al Espíritu Santo y a los demás, para que nuestras estructuras sean más ágiles, transparentes y fieles al Evangelio”, apuntó.
Otra frontera esencial, afirmó, es la reconciliación y la justicia, especialmente “en un mundo desgarrado por el conflicto, la desigualdad y el abuso”. Asimismo, abordó la frontera tecnológica, destacando tanto las oportunidades como los riesgos de la inteligencia artificial.
“La Iglesia debe guiar estos desarrollos éticamente, defendiendo la dignidad humana y promoviendo el bien común”, ha señalado el Papa, exhortando a los jesuitas a usar las plataformas digitales “para evangelizar, formar comunidades y desafiar los falsos ídolos del consumismo, del poder y de la autosuficiencia”.
Cuatro caminos de misión
El Papa continuó su intervención a las cuatro Preferencias Apostólicas Universales confirmadas por Francisco en 2019, a las que definió como “fronteras que exigen discernimiento y valentía”. “En cada continente, incluso en las sociedades más secularizadas, muchos buscan un sentido, a menudo sin saberlo”, dijo, haciendo alusión a la primera de estas preferencias apostólicas: mostrar el camino hacia Dios mediante los Ejercicios Espirituales y el discernimiento.
Otra de estas misiones es la de caminar con los pobres y excluidos. Ante ello, León XIV denunció “un sistema económico guiado por el beneficio, colocado por encima de la dignidad humana” y recordó su exhortación Dilexi te, donde aludía a la “dictadura de una economía que mata”.
Además, señaló que este desequilibrio empuja a millones a emigrar y exhortó a los jesuitas a promover modelos basados en la solidaridad y el bien común, evitando la “fatiga de la compasión” y confiando en el poder transformador del amor de Dios, como “la semilla de mostaza que se convierte en árbol”.
Por otro lado, ha subrayado que los jóvenes de hoy “aunque diversos, comparten una sed de autenticidad y de transformación”. Por eso, “la Iglesia debe hablar su lenguaje, no solo con palabras, sino con gestos y presencia”. Ante esto, ha animado a los jesuitas a “crear espacios donde los jóvenes puedan encontrar a Cristo, descubrir su vocación y trabajar por el Reino”, y mencionó la próxima Jornada Mundial de la Juventud en Corea como “un momento clave de esta misión”.
Retomando Laudato si’, citó: “Los jóvenes nos exigen un cambio. Se preguntan cómo es posible construir un futuro mejor sin pensar en la crisis ambiental”. El Papa subrayó que la conversión ecológica es espiritual y que requiere humildad y cooperación: “Ninguna institución puede afrontar sola esta tarea. Hagan de sus comunidades ejemplos de sostenibilidad, sencillez y gratitud por los dones de Dios”.
“Permanezcan con Jesús”
León XIV concluyó su mensaje con una invitación a permanecer unidos a Cristo, “como los primeros discípulos, que se quedaron con él todo el día”. “Permanezcan con él en la oración personal, en los sacramentos, en la adoración eucarística y en la vida comunitaria. Desde esa raíz encontrarán el valor para ir a cualquier parte, decir la verdad, reconciliar, sanar y liberar”, ha dicho el Papa.
Finalmente, León XIV ha expresado su deseo para la Compañía de Jesús: “Que sepan leer los signos de los tiempos con profundidad espiritual; abrazar todo lo que promueve la dignidad humana y rechazar lo que la degrada; ser ágiles, creativos, discernientes y siempre en misión”.