“Vuestro dolor es nuestro dolor”. Son las palabras del patriarca de Lisboa, Rui Valério, tras conocer lo ocurrido en el Elevador da Glória, el funicular accidentado en la capital portuguesa este 3 de septiembre, que ha dejado 15 muertos y 18 heridos. El obispo ha mostrado su solidaridad con los familiares de las víctimas del accidente desde la localidad de faro, donde participaba en las celebraciones del 25º aniversario de la ordenación episcopal del obispo de la diócesis del Algarve.
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Acompañar a las familias
Para Rui Valério “este 3 de septiembre quedará como una página negra en la historia de Lisboa por lo que ocurrió”, un accidente ele del funicular que ha sumido a todos en la “oscuridad”, señalaba en declaraciones a la agencia Ecclesia. El patriarca pensando en los más cercanos a las víctimas destacó: “A las familias, un sentimiento que quiero traducir en una palabra: estamos con vosotros”.
El prelado ha prometido tener presentes en sus oraciones a las víctimas del accidente y rezar para “que el Señor consuele a quienes necesitan ser consolados, que el Señor acuda en ayuda de quienes necesitan ser socorridos”. “En este momento somos pasajeros de ese ascensor y, en esa medida, nuestro dolor es profundo, pero iluminado y consolado por la fuerza de la oración”, añadió haciendo llegar su cercanía la empresa que gestiona el elevador.
En un comunicado, el Patriarcado de Lisboa además de las condolencias agradece en nombre del prelado “su gratitud y solidaridad con todos aquellos que, con generosidad y prontitud, se movilizaron para socorrer a las víctimas: equipos de emergencia, profesionales sanitarios, autoridades y voluntarios”.