José Beltrán, director de Vida Nueva
Director de Vida Nueva

Las HAM y la carcoma


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VIERNES

“En el fondo son muy buenas chicas”. Pónganlo en masculino también. Cuando se deja caer este tipo de expresiones, se pone en primer plano la entrega impagable de la persona, olvidando que en paralelo, a veces sin ser conscientes, se justifica la existencia de una estructura corrupta, se entra en la espiral de impunidad que acaba por justificarlo todo. Es más caro demoler el chiriguinto que darle una mano de pintura. Pero la carcoma no perdona.

Las Hijas del Amor Misericordioso -HAM-

Las Hijas del Amor Misericordioso -HAM-



SÁBADO

Festividad de Nuestra Señora de los Ángeles. Misa de campaña en el cerro. Homilía de Javier. “La devoción a nuestra patrona no es solo profunda en los que tienen raíces en Getafe, sino que se contagia a todos los que llegan de fuera. Con la Virgen de los Ángeles nadie se siente extranjero”. Y si uno se sabe hijo, también ha de saberse hermano de ese recién llegado. De esos ocho millones.

LUNES

Conversación sobre los retiros de impacto. Alguien me explica que no se puede meter todo en el mismo saco, porque están haciendo “mucho bien” y abriendo los ojos a tantos alejados… Y sin quererlo, deja caer la cuestión de las cifras. Una vez más, se mide al peso el éxito de la evangelización y de la pastoral vocacional. Se haría mucho bien si quienes están al frente de esos métodos contaran con una formación reglada y con profesionales. No nos engañemos. No la hay. No nos autoengañemos. No la va a haber. La buena voluntad acaba gestionando efervescencias emocionales y superponiendo parches de corticoides espiritualizantes cuando no se ha diagnosticado al que está enfrente. Y mucho menos aún se ha afrontado su dolencia de manera integral. Desde lo psicológico. Desde lo psiquiátrico. Y, por supuesto, desde un acompañamiento y discernimiento espiritual personal y comunitario. ¿Para qué complicarse tanto? Con meter en la coctelera un relato con los términos ‘milagro’, ‘fe’, ‘conversión’ y ‘salvación’, la bebida energética está servida. Y envasada al vacío. Sin dejar respirar de verdad al otro.

MARTES

Camino. Me cruzo con una madre y su hijo. Por casualidad, escuchó la pregunta del chaval. “¿Hasta cuando eres un niño?”. No tengo la respuesta.