La Conferencia Episcopal de Filipinas elegía el pasado sábado al arzobispo Gilbert Garcera de Lipa como su próximo presidente. Sustituye, así, a Pablo Virgilio David, obispo de Kalookan quien el pasado mes de marzo era elegido para encabezar la nueva Comisión de Sinodalidad establecida por la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC).
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La elección tuvo lugar el primer día de la 130ª asamblea plenaria de obispos en Anda, Bohol. Garcera, de 66 años, actualmente forma parte del Consejo Permanente de la CBCP como representante regional para el sureste de Luzón.
Trayectoria episcopal
Garcera es arzobispo de Lipa, hogar de más de 3,3 millones de católicos, desde 2017. Además, presidió anteriormente la Comisión de Misión y la Comisión de Familia y Vida del CBCP. Asumirá su nuevo cargo al frente del episcopado filipino a partir del 1 de diciembre de 2025.
Antes de convertirse en obispo, también se desempeñó como secretario general adjunto de la CBCP, secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Misión y director nacional de la Obra Misional Pontificia.
Fue ordenado sacerdote de la Arquidiócesis de Cáceres en 1983. En 2007, fue nombrado obispo de Daet, cargo que desempeñó hasta que fue trasladado a la archidiócesis de Lipa. En 2014, fue uno de los tres obispos filipinos que sirvieron como delegados al Sínodo sobre la Familia en el Vaticano.