¿Cuál será la próxima reencarnación del dalái lama en el exilio?

Tenzin Gyatso

El título de dalái lama significa literalmente “maestro reencarnado”. El actual gurú budista que ostenta esta denominación es Tenzin Gyatso. A sus 90 años cumplidos este domingo y en el cargo desde febrero de 1940 parece que es hora de ir pensando en su próxima reencarnación. Esto se ha convertido en un auténtico problema político ya que China –con la llegada del comunismo– ha despojado de territorio al que es también el dirigente de la Administración Central Tibetana, que vive desde hace décadas en el exilio en la India reivindicando su pueblo y los acuerdos previos, si bien desde 2011, cuando renunció a su poder gobernativo, lo hace meramente en clave espiritual y religiosa.

A Gyatso le reconocieron como encarnación del dalái lama fallecido cuando tenía cinco años. Fue reconocido por un grupo de monjes tras un amplio proceso de visiones y tras hacerle pasar una prueba al niño que reconoció a uno de los religiosos que estaban disfrazados como si tuvieran un oficio secular. El cargo lo asumió a los 15 años –frente a la tradición anterior de esperar a los 20 años–. Fue entronizado en 1940 porque comenzaban las tensiones con China quien pronto reclama la soberanía en el Tíbet. El discurso oficial chino es que impulsan una lucha por liberación de la teocracia feudal de los lamas sobre el Tíbet. Gyatso tratará de mediar en el conflicto chino visitando Pekín y al presidente Mao en 1954… aunque será complicado mantener un acuerdo u cavará finalmente exiliándose en el norte de la India. Mientras China trata de desprestigiar la labor del lama, este ha recibido muchos premios incluyendo el Premio Nobel de la Paz.

El sucesor

A medida que cumple los años, Tenzin Gyatso ya ha insinuado que va a comenzar el proceso de elección del nuevo niño que reconozca como reencarnación. Y eso lo va a hacer, para mayor cabreo de Chinca, fuera del Tíbet entre los exiliados represaliados por los comunistas distribuidos por todo el mundo. Para ello ha encargado la tarea a una fundación fundada por él la ‘Gaden Phodrang Trust’ y ha recalcado que China no tendrá ningún papel por mucho que esté forzando para que sea un bebé chino el próximo dalái lama.

De hecho, desde la secretaría del dalái lama han visto la sombra de china en acciones como la polémica en torno a las imágenes en las que Gyatso pide a un niño que le chupe la lengua (‘sic’). La fundación ha recibido ya estás indicaciones para que a su muerte busquen también, a través de visiones y casualidades donde podrá estar la próxima reencarnación, sería la 15ª, de este líder budista. Y los actos en torno al 90 aniversario hacen pensar que el budismo tibetano tiene todos los apoyos para resistir, pacíficamente, a China.