José Beltrán, director de Vida Nueva
Director de Vida Nueva

Votar va en serio


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JUEVES

Desayuno de periodistas en San Pablo. Puertas abiertas. Mascarillas. Aforo limitado. Y ganas de dar pasos adelante. Muchas. Novedades editoriales para el año más complicado de todos y para todos. Entre todas las apuestas, publicarán en español el libro que el Papa regaló este febrero a la Curia para que ejercitaran su interior. ‘Abbi a cuore il Signore’. Sí, ese que alguien descubrió por casualidad en un mercadillo italiano y que fue escrito en el siglo XVII, pero que podría haberse rubricado ayer mismo. Habrá que echarle un ojo. O dos.



VIERNES

Los obispos son menos rebuscados de lo que el imaginario busca pintar. Sobre todo, cuando ha pasado la elección de los altos cargos. Si toca renovar y recolocar a mitad de legislatura, no se andan con complicaciones. Son continuistas por tendencia, más allá de las sensibilidades de unos y de otros. Si alguien ha ocupado un cargo en interinidad, casi por inercia se le renueva la confianza. Que hay que completar una comisión, se escoge a uno o a otro sin más pretensión que la de seguir adelante con el trabajo.

Que alguien toma la palabra para abordar una cuestión delicada, no se generan aspavientos. O lo que es lo mismo, que en la Plenaria de primavera no hubo tejemaneje alguno ni tensión manifiesta. Debate lo hubo. Como lo hay siempre. Pero ahí nadie se tiró los trastos. Es más, incluso aquello estuvo algo descafeinado. No porque los pastores estuvieran desganados o ajenos a lo que pasa fuera. A ellos, como a todos, las virtualidades, semipresencialidades y distancias sociales también les limita la espontaneidad. Que son humanos, oiga.

SÁBADO

Nacho Cano. Gran Cruz del 2 de mayo. Durante la entrega, recuerda que se cumplen cuarenta años de Hoy no me puedo levantar, imprescindible de Mecano. El compositor dice que esa añoranza permanente hacia la ‘Movida’ de los 80 podría encontrar relevo en un resurgir creativo y social frente al horror de la pandemia. No las tengo todas conmigo.

DOMINGO

Evangelio de la vid y los sarmientos. Desde el altar, Juanjo nos garantiza que no hay viña igual. Cada poda es diferente. Cada fruto es único. Como cada uno. Al acabar la misa, Maruchi y yo le vacilamos. Que el párroco riojano lo demuestre con una cata.

MARTES

Colas en todos los colegios electorales por los que paso. Va a ser que esto de votar se toma en serio.

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