En la recta final del Año Santo de la Esperanza, la familia debe encarnar el modelo de testimonio, porque “no hay mejor forma de incidencia que la coherencia”.
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Afirma Alirio Cáceres, diácono permanente de la arquidiócesis de Bogotá, a ADN Celam en la Festividad de la Sagrada Familia, que se conmemora este 28 de diciembre.
Citando al papa León XIV, Cáceres asegura que la familia es el lugar donde la fe, la vida, el amor, el respeto “se transmiten de generación en generación”.
Por ello, “en la familia se aprende a pedir permiso sin avasallar, a decir gracias como expresión de una sentida valoración de las cosas que recibimos, a dominar la agresividad y a pedir perdón cuando hacemos algún daño”.
Señala que no hay ninguna familia tan pobre que no pueda ofrecer nada, ni tan rica que no necesite recibir nada, por tanto, si la fiesta de la Sagrada Familia se celebra en Navidad es porque “Dios mismo en persona nos señala que la encarnación, el abajamiento, la humildad son llaves para abrir los candados de la precariedad, la migración y el deterioro ambiental”.
Recuperar la dignidad humana
En su papel de padre de familia y teólogo, denuncia la llamada cultura del descarte al tiempo que invita a “recuperar la dignidad humana”, porque el modelo de la Familia de Nazareth debe “llevarnos a una experiencia viva de Dios, donde las relaciones sean solidarias, dialogantes y cuidadoras”.
“La familia, como Iglesia doméstica, está llamada a encarnar la cultura del encuentro, el servicio y la misericordia en contextos marcados por la violencia y la fragilidad social”, añadió.
Lamentó que “preferimos los cachorros a los bebés, o desplazamos con tecnología la mano de obra” con esto se pierde el horizonte del desarrollo humano integral. Recordó que el papa Francisco – siempre recordado – plantó cara a la cultura del descarte.
El diácono colombiano invitó a encontrar en la vida de Jesús, incluyendo su muerte y resurrección, las claves para dar sentido a los momentos de dolor, luz, gozo, gloria “en sintonía con los misterios del Rosario”.
Cáceres es un reconocido ecotéologo.
