El arzobispo de Sevilla, Ángel Saiz Meneses, y el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, han compartido cerca de cuarenta y cinco minutos esta mañana con el papa Francisco en una audiencia en el que le han informado de las conclusiones del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular, celebrado en Sevilla el pasado diciembre.
El prelado y el político del Partido Popular han encabezado una delegación que se ha encontrado con el Pontífice en su residencia de Santa Marta, debido a la bronquitis que aqueja al Sucesor de Pedro.
Diálogo vivo
El arzobispo ha encontrado “muy simpático y alegre, como es siempre”, lo que ha propiciado un diálogo “muy vivo” entre todos los participantes. “El Papa ha vehiculado algunos criterios y algunos puntos de doctrina a través de sus respuestas, y la verdad es que hemos salido todos entusiasmados”, señaló Saiz Meneses.
A su salida de la cita, Saiz Meneses defendió, a la luz del congreso sevillano, que Francisco es “el pontífice que más magisterio ha ofrecido sobre este ámbito de la piedad popular en la Iglesia”. A la par, ha valorado que entiende muy bien la piedad popular “porque la ha vivido en Argentina”. “Por tanto, él nos entiende, nos alienta y yo creo que espera de nosotros”, remarcó el pastor de Sevilla. Como regalo, le ha entregado “alimentos de la tierra” que son “medicina natural” que “seguro que le van a reconfortar en estos días”.
Nuestras costumbres
Por su parte, Juanma Moreno subrayó la importancia de esta audiencia en tanto que “Andalucía tiene mucho que decir porque es reflejo de esa pasión de ciudadanos de distintas edades y procedencias que se sienten vinculados a nuestras tradiciones y a nuestras costumbres”. El presidente andaluz ha vuelto a invitar al Papa para que visite Andalucía y ha transmitido a Francisco la labor social que desempeñan las hermandades y las cofradías.
Ante los periodistas, también ha puesto en valor la gran procesión jubilar que se va a celebrar en mayo en Roma y que contará con dos tallas andaluzas: el Cristo de la Expiración, conocido como El Cachorro, de Sevilla, y la Virgen de la Esperanza, de Málaga.”Ello va a suponer un revulsivo de proyección de lo que es Andalucía para el mundo católico y eso es muy positivo porque todos los elementos de proyección y todo lo que es el turismo vinculado al culto, a la devoción y religiosidad que ha crecido mucho en el mundo tiene en Andalucía su epicentro”, apuntó el presidente.