Las víctimas de abusos exigen un estatuto propio y una comisión de trabajo a tres bandas con la Iglesia y el Estado

  • Las principales asociaciones plantean su plan de acción a la CONFER y exigen la retirada del informe ‘Para dar luz’
  • “Para nosotros es necesario hacer este camino todos juntos y dar pasos en la justicia restaurativa”, aseguran desde la Conferencia Española de Religiosos

Las principales asociaciones que representan a las víctimas de abuso sexual en el seno de la Iglesia se han reunido esta tarde con la cúpula de la Conferencia Española de Religiosos (CONFER). Al igual que sucediera con el reciente encuentro mantenido en la Conferencia Episcopal, los supervivientes de esta lacra han compartido, no solo el relato de su drama personal, sino también la hoja de ruta que han diseñado para lograr una reparación integral al daño sufrido.



“Ha sido un encuentro cordial y amable, de escucha y diálogo, hemos puesto sobre la mesa el trabajo que estamos haciendo en la CONFER, y les hemos manifestado nuestro compromiso con las víctimas”, han asegurado desde la plataforma que representa a los consagrados españoles tras el encuentro. “Para CONFER es necesario hacer este camino todos juntos y dar pasos en la justicia restaurativa”, añaden.

Apoyo integral

“Estamos muy en sintonía con la CONFER, quieren y tienen ganas de crear una comisión de trabajo unificada”, explica a Vida Nueva, Juan Cuatrecasas, de la asociación Infancia Robada.  Y es que, a las ya conocidas peticiones vinculadas a la financiación de las terapias, medidas para solventar la exclusión laboral y educativa y el trato individualizado, las asociaciones han sumado como demanda la puesta en marcha de una comisión de trabajo que esté integrada por la asociaciones, la Iglesia y el Estado.

Para Infancia Robada, el hecho de que el Estado forme parte de la comisión sería imprescindible, en tanto que hay medidas como la concesión de la discapacidad a una víctima de abusos que no puede estar en manos de la Iglesia en tanto que la concede la Administración.  “Además, el hecho de que el Defensor del Pueblo, en nombre del Estado, formara parte de ese equipo de trabajo sería una medida garantista de que todo el proceso de diálogo se llega a buen puerto”, añade Ana Cristina Cuevas, también perteneciente a Infancia Robada.

De la misma manera, exigen que la Conferencia Episcopal Española cree un estatuto de la víctima de la pederastia eclesial que podría ser referente, sostienen desde las asociaciones, para las víctimas de abuso de otros ámbitos.

No a la revictimización

Además, las víctimas transmitieron su rechazo al informe ‘Para dar luz’ elaborado por la Conferencia Episcopal. “No podemos permitir que se nos siga revictimizando al considerar que los casos no están probados. Aceptarlo sería volver atrás y, de la misma manera, no queremos que se haga otro informe más”, expresa Cuevas.

Antes de reunirse en la CONFER, las víctimas mantenían una reunión con el Defensor del Pueblo en el que, en palabras de Cuevas, han solicitado a Ángel Gabilondo que se pongan marcha el engranaje del Congreso de los Diputados para comenzar a depurar responsabilidades: “El presidente Pedro Sánchez se comprometió en la investidura y creemos que ha pasado ya un tiempo considerable para que empiece a darse una salida a los supervivientes”.

“Hay muchas víctimas que necesiten que esto empiece a moverse”, suscribe Cuatrecasas. En este sentido, también plantea otras medidas como el hecho de que haya psicólogos en todos los centros escolares como medida preventiva o que en las pruebas de acceso a la universidad se tenga en cuenta la condición de víctima de abusos.

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