“No necesitamos mediadores entre Ucrania y el agresor”. Con esta contundencia se manifestó ayer el presidente de Ucrania, Volodomir Zelenski, tras su encuentro con el Papa Francisco. “No es cuestión del Vaticano, ni de EEUU, ni de Latinoamérica, ni de China, ni de ningún otro país del mundo: Putin sólo mata, no podemos mediar con él”, aseveró al ser entrevistado el programa de televisión ‘Porta a Porta’ de la RAI.
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Además, después de su primera reunión con el pontífice tras iniciarse la guerra, Zelenski compartió en sus redes sociales que le desarrolló los diez puntos de su plan de paz, que, como es sabido, incluye que Rusa abandone todos los territorios ocupados en Ucrania. “Hablé de esto como único algoritmo eficaz para lograr una paz justa. Le propuse que se una a su implementación”, comentó el líder ucraniano en Twitter.
En paralelo, puso en valor el compromiso del Papa, especialmente, “su atención personal a la tragedia de millones de ucranianos” refiriéndose a la deportación ilegal de niños a Rusia. “Hablé de decenas de miles de niños ucranianos deportados. Debemos hacer todo lo posible para que vuelvan a casa”, compartió. Además, Zelenski compartió con Francisco su deseo de que contribuya ante la comunidad internacional para “que se condenaran los crímenes de Rusia en Ucrania” porque “no puede haber igualdad entre la víctima y el agresor”.
Situación humanitaria
Por su parte, la Oficina de prensa de la Santa Sede, en un tono más genérico, en la que se subraya que ambos abordaron “la situación humanitaria y política en Ucrania provocada por la guerra en curso”.
“Ambos coincidieron en la necesidad de continuar los esfuerzos humanitarios para apoyar a la población. El Papa hizo especial hincapié en la urgente necesidad de ‘gestos de humanidad’ hacia las personas más frágiles, las víctimas inocentes del conflicto”, expresan desde el Vaticano.
