“La Iglesia de Ciudad Rodrigo goza de buena salud, porque tenemos ocho siglos y medio de existencia, con 35.000 habitantes, 121 parroquias, una Diócesis perfectamente organizada, con una Curia, delegaciones, secretariados, organismos, siete arciprestazgos, tres monasterios, once casas religiosas y un Seminario que viene a ser como la columna vertebral de la Diócesis”. Con estas palabras desmentía el administrador apostólico de Ciudad Rodrigo, Jesús García Burillo, las informaciones sobre la posible supresión de la Diócesis y su adhesión a la de Salamanca.
García Burillo hizo estas declaraciones durante la rueda de prensa de presentación del balance económico y pastoral del último ejercicio. “La Iglesia de Ciudad Rodrigo mira hacia la sociedad y es estimada por ella porque así nos lo demuestra a través de sus instituciones”, subrayó el administrador apostólico.
A pesar de esto, lo cierto es que el Vaticano lleva más de año y medio sin hacer ningún nombramiento en la Diócesis, lo que, junto a la oleada de jubilaciones y la cercana renuncia del obispo de Salamanca el próximo año, ha dado lugar a estas suposiciones.
Las cuentas de la Diócesis
García Burillo presentó el balance económico de la Diócesis junto al ecónomo diocesano, Fernando Sánchez Tendero. En las cuentas se pudo apreciar que hubo un déficit de 134.201,27 euros que sería asumido con los ahorros de la propia Diócesis.
En su mayor parte – 100.000 euros -, estos gastos corresponden a y que corresponden en su mayor parte a la ayuda prestada al Seminario. Por su parte, los gastos provienen, en un 52% – algo más de un millón de euros – de la X de la Renta, así como de los 426.000 euros de aportaciones de los fieles.
