Las autoridades del Vaticano han incautado hoy, 1 de octubre, documentación y aparatos electrónicos de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, tal como recoge EFE. La decisión de requisar este material se ha producido después de que, el pasado verano, se recibieran una serie de denuncias sobre operaciones financieras antiguas.
Fueron el Instituto para Obras de Religión – el banco vacaticano – y la Oficina del Revisor General quienes presentaron la denuncia, con el objetivo de “analizar operaciones financieras llevadas a cabo desde hace tiempo”. La incautación ha tenido lugar en dos entes del Vaticano: la primera sección de la Secretaría de Estado, así como la Autoridad de Información Financiera (AIF), un organismo de la Santa Sede instituido para la lucha contra el blanqueo de capitales.
El Vaticano ha informado sobre esta operación, que ha sido ordenada por Gian Piero Milano, promotor de Justicia del Estado pontificio, y por su adjunto, Alessandro Diddi. Sin embargo, en la nota por la cual se informa de la incautación no se hace referencia al motivo por el cual se lleva a cabo la investigación ni qué información es la que se está buscando.
