Mientras James Martin felicita al Orgullo Gay, el obispo Tobin pide a los católicos que no lo celebren

  • Un tuit del prelado sobre los daños morales de las celebraciones de la comunidad homosexual divide a una de las diócesis con mayores católicos de Estados Unidos
  • Un párroco en Providence pidió de rodillas a gays y lesbianas católicos que no se fueran de la Iglesia

Con el comienzo del mes de junio en Rhode Island (Estados Unidos) como en tantos otros lugares han comenzado las celebraciones del ‘Orgullo’ con el objetivo de reivindicar la libertad en lo que a orientación sexual se refiere. Con este motivo, el obispo de Providence Thomas J. Tobin (no confundir con el cardenal Joseph William Tobin, arzobispo de Newark) tuiteó el pasado sábado advirtiendo a los católicos que no “apoyen o asistan” a las iniciativas organizadas con motivo del ‘Mes del Orgullo LGBTQ’, ya que este “promueve una cultura y fomenta actividades que son contrarias a la fe y a la moral católica”. A lo que añadió que estas propuesta “son especialmente dañinas para los niños”.

El mensaje en las redes sociales ha suscitado en los dos primeros días más de 90.000 comentarios. Muchos han apoyado al obispo ya que algunas de las iniciativas son “poco educativas” y las ven como una provocación en uno de los estados más católicos de norteamérica. Pero también han suscitado muchas reacciones en contra, como la de actrices como Mia Farrow o Patricia Arquette. Además, para muchos usuarios de las redes sociales el mensaje del obispo es una ocasión para recordar los casos de abusos de la iglesia estadounidense.

Tender la mano

Contrasta el mensaje con el del jesuita James Martin, que ha afirmado que el mes del ‘Orgullo’ “es un tiempo para tender la mano” a las personas con distintas orientaciones sexuales. Especialmente, el religioso piensa en aquellas “personas que no sienten orgullo, sino una profunda vergüenza, e incluso están tentadas a suicidarse, debido a su orientación sexual o identidad de género”.

A ellas, Martin les dedica una oración que recogió en su libro ‘Tender un puente’. Una plegaria que dedica de forma especial a los jóvenes que viven estas situaciones de discriminación.

No os vayáis…

El mensaje del obispo también ha llevado a que se produzca una concentración frente al obispado y, según los medios locales, en una iglesia de la capital el párroco de San Raimundo, Edward L. Pieroni, pidió públicamente en la misa de los domingo a los gays y lesbianas católicos que no se fueran de la iglesia. “Os ruego de rodillas que nos os vayáis”, señaló, tras confesar que el mensaje del obispo era como “una bofetada más”.

La gobernadora del estado, la demócrata Gina Raimondo, señaló que los comentarios eran “muy desafortunados” aunque confía que en el obispo no había ninguna intención de herir a nadie. El propio Tobin, el domingo, señaló que su tarea como obispo es enseñar la fe de forma “clara y misericordiosa, incluso en los temas más difíciles y delicados”. Rectificación que unos ven excesiva, mientras a otros les parece del todo insuficiente.

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