La Revuelta de Mujeres se planta a las puertas de 18 catedrales para que la “igualdad se haga costumbre”

La plataforma de las feministas católicas españolas multiplica sus concentraciones en torno a las reivindicaciones del 8 de marzo

La Revuelta de Mujeres en la Iglesia ya se va convirtiendo en una tradición en alguno de los domingos cercanos al 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Una oportunidad para reclamar que la “igualdad y la dignidad se haga costumbre” en la sociedad y en la Iglesia. Convocada por distintos colectivos, en esta ocasión las concentraciones se han desarrollado en Barcelona, Bilbao, Burgos, Ciutadella, Córdoba, Granada, Huelva, Las Palmas, Logroño, Madrid, Oviedo, Santander, Santiago de Compostela, Sevilla, Valencia, Vigo, Vitoria y Zaragoza.



Nuevas reclamaciones de siempre

En torno a la Catedral de la Almudena, en Madrid, se han reunido en torno a 300 personas. La teóloga Pepa Torres invitó a unirse a “otros gritos de mujeres en el mundo y en la Iglesia” para hacer llegar el clamor de aquellas que han sido “vulneradas por la pobreza” o víctimas de “los abusos de poder, sexuales y de conciencia” que dentro de la Iglesia se han cometido contra menores y “adultas vulneradas”. Por ello, reivindicó una Iglesia que “deje de ejercer toda forma de asimetría de poder” y “abandone el modelo clerical de masculinidad hegemónica”, según recoge Europa Press.

En este acto se ha homenajeado además la reflexión teológica de las mujeres, así como el camino recorrido por el propio movimiento. En el manifiesto final han pedido cambios en la Iglesia como “el acceso al diaconado y al presbiterado femenino, para atender a las comunidades cristianas” o denunciado “la desproporción entre el número de teólogas preparadas y los puestos que ocupan como docentes en las facultades de Teología y en otros puestos de responsabilidad”. Otras reivindicaciones han sido eliminar “el lenguaje patriarcal y sexista en las homilías, textos litúrgicos y documentos” o que “la moral sexual de la Iglesia deje de culpabilizar a las mujeres”. “Trabajamos para recuperar una Iglesia donde las mujeres seamos reconocidas como sujetos de pleno derecho, con voz y voto en todas partes y valoradas por nuestros talentos y carismas”, sentenciaron. Entre las consignas clásicas: “Menos dogma sexual, más ternura al personal”, “Con voz, con voto, así nos quiere Dios”, “Nosotras somos el cambio” o “Limpiar y poner flores, que lo hagan los señores”.

Buenas prácticas

Además, en esta ocasión, la revuelta viene acompañada por la elaboración de un Documento de Buenas Prácticas inclusivas. Un texto que presentarán este lunes, 6 de marzo, a la Conferencia Episcopal Española donde serán recibidas por el secretario del Equipo Sinodal, Luis Manuel Romero; y que ya ha sido ofrecido a la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), con propuestas concretas para “desterrar el clericalismo, para lograr una Iglesia menos jerárquica y más circular, verdadera comunidad de iguales, al servicio de las personas empobrecidas y excluidas”. En el texto se ofrecen 14 propuestas para estimular la participación e incorporación de las mujeres en diferentes niveles y sectores eclesiales.

En el acto de Vigo se colocaron diferentes zapatos en las escaleras de la parroquia del Cristo de la Victoria como llamada a “caminar juntas por la igualdad y dignidad en la Iglesia”. Gesto similar se ha repetido en Valencia. Junto a la concatedral de Logroño se reivindicó la apuesta de Jesús por la igualdad como “una de sus propuestas más radicales” ante la sociedad de su tiempo.

Noticias relacionadas
Compartir