‘Qué florezca la alegría de donar’. Bajo este lema la Nunciatura Apostólica de Colombia, con el apoyo directo de la Conferencia Episcopal, ha iniciado oficialmente la colecta del Óbolo de San Pedro, mejor conocida como la jornada mundial de la caridad del Papa, una tradición de vieja data (siglo VII), cuyo fin es la búsqueda de fondos que los fieles católicos ofrecen al Santo Padre en beneficio de las obras de caridad en el mundo.
Luis Mariano Montemayor, nuncio apostólico de Colombia, ha dicho en rueda de prensa, en la sede del episcopado, que los donativos serán empleados en obras misioneras, iniciativas humanitarias y de promoción social. “Es más hacia la caridad que el Papa puede ejercer en situaciones graves que exige además una asistencia inmediata”, acotó.
Conciencia de la participación
Asimismo el Nuncio ha comentado que en muchas partes del mundo el factor clave del éxito de la colecta es la espontaneidad, “mucho depende de la iniciativa de las mismas comunidades”, que “el pastor local, el obispo, las mismas familias se muevan para participar, entonces los resultados dependen mucho de esa iniciativa”.
También ha resaltado que con esta acción se va afirmando en la conciencia de nuestro pueblo la necesidad de participar y ser protagonistas de su propia gestión pastoral. “En Colombia los resultados de la colecta se han multiplicado por 6 desde sus inicios en el año 95 aún con altos y bajos que acompañan la economía del país junto a otros problemas”, ha aseverado.
En ese sentido ha destacado que lo “importante de esta campaña no es la cuantía material, sino la participación, es eso lo que queremos incentivar, que cada católico se sienta unido al Santo Padre”.
A donar con alegría
En el país el domingo 30 de junio –tras la solemnidad de San Pedro y San Pablo– fue la fecha elegida para que los fieles lleven sus ofrendas a todas las parroquias de las 76 jurisdicciones eclesiales. No obstante, durante todo el mes de junio se transmitirán vídeos para motivar a toda la sociedad y grupos de Iglesia.
“Queremos motivar a la comunidad católica de Colombia a donar con alegría en la colecta de la caridad del Papa con la conciencia de estar ayudando a mucha gente necesitada de distintas partes del mundo”, ha informado, Jaime Marenco, director de comunicaciones de la Conferencia Episcopal.
“En ese sentido buscamos fortalecer el valor de la solidaridad en Colombia y estimular la acción de compartir con alegría, lograr una integración nacional en un momento en el que hay un país polarizado y motivar la participación de los jóvenes”, complementó el sacerdote.
Por una Colombia unida
Otro de los aspectos a destacar con esta iniciativa es la necesidad de mantener encendido en los fieles el deseo de participar con alegría en las acciones de iglesia “no solo porque se necesite dinero para impulsarlas, sino porque como bautizados tenemos la necesidad de sentirnos unidos”, ha mencionado Marenco.
Con la campaña de 2019 no sólo se busca comunicar que el Papa necesita dinero para ayudar a los más necesitados, “sino que uniéndonos desde Colombia a la gestión pastoral del Santo Padre podemos ayudar a muchísimas personas que sufren en diferentes lugares del mundo”, acotó.
“Se pretende pues que sintiéndonos unidos como Iglesia que peregrina en Colombia florezca la alegría de donar y palpemos la incidencia de la iglesia cuando como miembros de un solo cuerpo logramos actuar colegiadamente para mejorar la vida de los hermanos más necesitados de la casa común”, ha resaltado.
Canales de recaudo
La invitación que hacen a las personas de buena voluntad es a realizar desde ya sus donativos a través de los canales de recaudo disponibles por consignación bancaria a la cuenta de ahorros de la entidad Davivienda, número 014542872, a nombre de la Nunciatura Apostólica.
Igualmente pueden ingresar en el enlace www.zonapagos.com/t_nunciatura o si lo prefieren el mismo día domingo 30 de junios pueden hacerlo llegar a su parroquia más cercana o días previos en el despacho parroquial.
Foto: CEC
