Tribuna

Georg Gänswein, el ángel guardián de Benedicto XVI

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Antonio Pelayo, corresponsal de Vida Nueva en Roma ANTONIO PELAYO | Corresponsal de Vida Nueva en Roma

Prefecto de la Casa Pontificia, es un hombre discreto a pesar de que sabe que, siempre que aparece en público, muchos ojos –especialmente femeninos– se fijan en él. Lo lleva con admirable paciencia.

Él sigue en su doble tarea: ser el ángel guardián del papa emérito, Benedicto XVI, y asistir a su sucesor en todas sus actividades públicas. También encuentra tiempo de vez en cuando para otras actividades. Asistió, por ejemplo, a la presentación de un CD de la Deutsche Grammophon con músicas de la Capilla Sixtina. No en vano es un alemán de pura cepa.

En el nº 2.958 de Vida Nueva