Recensión de Fernando Cordero sobre la obra de Raniero Cantalamessa ¿Tú Crees? (PPC, 2014).
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Título: ¿Tú crees? Pensamientos actuales sobre la fe
Autor: Raniero Cantalamessa
Editorial: PPC, 2014
Ciudad: Madrid
Páginas: 299
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FERNANDO CORDERO, SS.CC. | El capuchino italiano Raniero Cantalamessa (Colli del Tronto, 1934) es sobradamente conocido por ser, desde 1981, predicador de la Casa Pontificia. Con motivo del Año de la fe, la editorial Àncora de Milán ha recopilado el abundante material que este religioso, especialista en la Historia de los orígenes cristianos, ha ido elaborando con el objetivo de ofrecer unos pensamientos actuales sobre la fe. Destaca la tesis que, en forma de pregunta, nos lanza el título, tomada del estimulante prólogo del autor. Creer, aunque resulte obvio, es un acto “en primera persona”.
La obra consta de cinco partes. La primera, de corte introductorio, gira en torno a la metáfora de la puerta de la fe en Cristo Jesús, con la invitación a abrir la misma desde la libertad, teniendo como modelo a María.
A continuación, siguen las partes centrales del volumen. El autor va desgranando en forma de pequeños capítulos los diversos artículos del credo niceno-constantinopolitano. Se dan cita diferentes elementos: el verdadero rostro del Padre, la pregunta de Dostoievski sobre la belleza que salvará el mundo, por qué Dios se ha hecho hombre, el itinerario hacia Dios fundado en Jesucristo o la respuesta de Erasmo a las acusaciones de Lutero sobre la Iglesia.
Cristo en la liturgia
Prosigue con unos capítulos en los que va desarrollando el misterio de Cristo a través de los tiempos litúrgicos, con varias citas de san Agustín. Nos regala otra metáfora del mismo campo semántico: “Jesús, hombre y Dios, se parece a algunas casas que tienen la entrada en una misma calle común de la ciudad, con una puerta parecida en todo a las demás puertas, pero que, una vez que se entra, asomándose al balcón, en el lado contrario se encuentra un panorama inmenso de montañas o una vista sobre el mar o sobre un gran parque lleno de verdor y silencio” (p. 150).
La parte más concreta del volumen, donde más pistas da el padre Cantalamessa para vivir en el día a día, es la que lleva por título “Dar testimonio de la fe”. Aquí aparecen las virtudes teologales, los sacramentos, la Iglesia y la familia, la oración, la Biblia y las bienaventuranzas. Hace hincapié el autor en la necesidad de la escucha y de la meditación de la Palabra. Nos recuerda aquello de Teresa de Lisieux: “En el Evangelio encuentro todo lo necesario para mi pobre alma”. Culmina el escrito con “María, peregrina de la fe”.
Valorando el trabajo de selección y organización de Agostino Terrani, tenemos por delante unas páginas que, sin ser lo más destacado de la bibliografía del reconocido capuchino, pueden servir para la oración personal o la meditación comunitaria, echando mano del índice que nos sitúa en un interesante mapa de los contenidos de la fe.
En el nº 2.903 de Vida Nueva
