Libros

Los rostros de Dios en la Biblia


Un libro de Juan Antonio Mayoral (BAC, 2012). La recensión es de Enrique Cabezudo Melero

Los rostros de Dios en la Biblia, Juan Antonio Mayoral, BAC

Título: Los rostros de Dios en la Biblia. Teología bíblica para meditar

Autor: Juan Antonio Mayoral

Editorial: BAC, 2012

Ciudad: Madrid

Páginas: 256

ENRIQUE CABEZUDO MELERO | Juan Antonio Mayoral es un biblista bien conocido por sus trabajos de divulgación pastoral de los contenidos de la Sagrada Escritura, que, en definitiva, son los contenidos fundamentales de nuestra fe. A finales de 2012, publicó en la Biblioteca de Autores Cristianos (BAC) un denso volumen de 230 páginas titulado Los rostros de Dios en la Biblia. Un libro que encaja bien en el Año de la fe que estamos viviendo, ya que trata sobre el elemento nuclear de nuestra fe.

El tema del libro está de actualidad. Por apuntar algunos ejemplos, destacamos que las jornadas de la Asociación Bíblica Española (ABE), celebradas en septiembre del año pasado en Sevilla, tuvieron el mismo título, señalando en el folleto de su presentación que con él “se evoca el corazón teológico de la Biblia”. También las jornadas organizadas el 16 de febrero por la Editorial Verbo Divino, en colaboración con el Instituto Bíblico Oriental, tenían ese lema.

Benedicto XVI, en su catequesis del 16 de enero de este año, decía: “Jesús no nos dice algo sobre Dios, no habla simplemente del Padre, sino que es revelación de Dios, porque es Dios, y nos revela de este modo el rostro de Dios”.

En su excelente y breve presentación al comienzo de la publicación, Joaquín L. Ortega señala que “se percibe en el libro tanto la cabeza del escriturista o del teólogo como la mano del pedagogo”. En efecto, el libro tiene una gran hondura teológica, basada en actualizados conocimientos bíblicos, expuesta con claridad y sencillez, cualidades que lo hacen muy provechoso para cualquier lector interesado que busque alimento espiritual en él.

El autor señala que su libro se centra “en la experiencia humana y religiosa vivida por algunos personajes de la Biblia cuya fe sirve de modelo y referencia a los creyentes de todos los tiempos”. Recorriendo los capítulos de la obra, vemos que examina esa experiencia en Adán y Eva, Abraham y Sara, Moisés, Noemí, Rut y Ana, David, Elías, Oseas, Jonás y en Job; y, para terminar, en Jesucristo. Al empezar su último apartado, en el que analiza la parábola del hijo pródigo, el autor dice: “Concluimos ya nuestro recorrido por los rostros de Dios, como no podía ser de otro modo, con aquel que con más fuerza y expresividad mostró Jesús, el de Padre”.

El libro es realmente Teología bíblica para meditar, como reza su subtítulo, y de esa meditación se puede saltar fácilmente a la oración, con lo que el libro se convierte en un gran apoyo para una lectio divina temática que busque las imágenes de Dios, los rostros divinos, que proyecta la Biblia.

En el nº 2.846 de Vida Nueva.

Actualizado
03/05/2013 | 06:35
Compartir