Una obra Jesús Álvarez Maestro (Edibesa, 2012). La recensión es de Francisco Armenteros Montiel
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La nueva parroquia evangelizadora. Renovación interior y creatividad pastoral
Autor: Jesús Álvarez Maestro
Editorial: Edibesa, 2012
Ciudad: Madrid
Páginas: 302
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FRANCISCO ARMENTEROS MONTIEL | El P. Jesús Álvarez Maestro, autor de numerosas publicaciones, se presenta y justifica: religioso (agustino recoleto), con “larga vida pastoral”, y que se limita a ofrecer un “humilde manual” en el que –advierte– hay ideas repetidas. A pesar del título, el libro no aporta nada… “nuevo” (“todo está dicho”; “ya está todo inventado”; “no estoy preparado para dar lecciones a mis compañeros”, reconoce). Pero, a la vez, recoge lo central, en el fondo y en la forma: la idea fundamental de la nueva misión es Dios.
Sus capítulos hablan del amor a Dios, de Cristo el Buen Pastor, de “una única Iglesia y ecumenismo”, de la santidad y la comunión eclesial, del sacerdocio común de los fieles, de la conversión personal, de la caridad como “signo más creíble”, de la evangelización –tarea de todos y “de tú a tú”–, de la piedad popular, de Internet, de turismo y patrimonio, de los jóvenes… En todos ellos, hace oportunas referencias, y da soluciones, a los males actuales: ateísmo, escepticismo, agnosticismo, secularización, hedonismo…
De subtítulo más acertado (Renovación interior), insiste en los “valores espirituales”, y se hace evidente que el contenido es más amplio que “la parroquia”. Sugiere aprovechar la riqueza de los movimientos, asociaciones, prelaturas… “en todos los lugares de la actividad humana”.
Con abundantes citas de autores, y mención especial a su padre san Agustín (más de 50), destaca la fidelidad a la Tradición y al Magisterio, con dos “peros”: citar a H. Küng, aunque con acierto, y un desliz: “Es bueno que la Iglesia reconozca con humildad sus pecados”, que luego aclara: “El rechazo de la Iglesia por los pecados de sus miembros”. En lo pedagógico, está actualizado, con referencias al Bosón de Higgs, al documento de la CEE sobre la verdad del amor humano, al Atrio de los gentiles, etc.
Hay que subrayar el sentido sobrenatural y el optimismo del autor, así como el tono práctico y animante; hace que todo parezca asequible, aunque cometamos fallos: “Tenemos en parte la culpa de esta situación”. Anima al sacerdote a “que otro le sustituya”.
El lector interesado puede encontrar esas ideas básicas –acción de Dios, catecumenado, renovación espiritual…– en el libro de monseñor Sebastián Evangelizar (Encuentro, 2ª ed.) y, en esquema, en el Mensaje final del Sínodo de los Obispos.
Obra recomendable aunque, tal vez por la urgencia en publicarla, abundan las erratas. Edibesa, que con ella inicia la colección ‘Buen Pastor’, habrá tomado nota para próximas ediciones.
En el nº 2.826 de Vida Nueva.
