La novela de la semana es de Muriel Spark (Contraseña Editorial, 2012). La recensión es de Juan Carlos Rodríguez
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La abadesa de Crewe
Autora: Muriel Spark
Editorial: Contraseña Editorial, 2012
Ciudad: Zaragoza
Páginas: 116
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JUAN CARLOS RODRÍGUEZ | Ante el famoso caso de contraespionaje y medias verdades que fue el Watergate, a Muriel Spark (Edimburgo, 1918-Florencia, 2006), ya convertida al catolicismo, se le ocurrió erigir una novela que le permitiera acercarse al escándalo que obligó a dimitir a Richard Nixon: La abadesa de Crewe, publicada en 1974, y traducida ahora por la joven editorial Contraseña.
Lo relevante es que Spark trasplanta el escenario a un “pintoresco convento, casi benedictino, casi jesuita”. Y al pulso entre las dos candidatas a sustituir a Hildegarde, la superiora recién fallecida: Alexandra, subpriora hasta el momento, y la revolucionaria Felicity.
La lucha –repleta de ironías, dobles sentidos y hasta poesía metafísica inglesa– es aparentemente desigual: Alexandra, virtual abadesa, tiene a su favor a las intrépidas Walburga y Mildred y, sobre todo, el sistema de escuchas que ha hecho instalar en el convento. Y que Felicity ha denunciado por televisión y pedido la intervención de Scotland Yard. Spark en su esencia y, como ella decía, con Dios por testigo.
En el nº 2.827 de Vida Nueva.