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EL REVISTERO: ‘Magnificat’


revista Magníficat

J. FANDIÑO | A Pablo Cervera siempre le preguntan si el mensual Magnificat, del que es redactor jefe, no está más bien dirigido a sacerdotes o religiosos. Responde que, aunque no quedan excluidos, estos tienen la Liturgia de las Horas o el Diurnal y el Misal.

Y es que esta publicación que nació tras el Concilio Vaticano II está pensada, sobre todo, para los laicos. Así, en Magnificat encontramos cada mes todo lo necesario para rezar cada día: una oración por la mañana y otra por la tarde inspiradas en la Liturgia de las Horas, así como los textos de la Misa.

También una meditación de los Padres de la Iglesia o de maestros espirituales –ya sean clásicos o contemporáneos–, relatos de vidas de santos, así como artículos sobre espiritualidad bíblica o enseñanzas para la vida espiritual. En el marco del Año de la fe, varios obispos españoles explican el Credo y los Sacramentos. Además, la publicación incluye el comentario de una obra de arte a cargo de María Rodríguez Velasco, profesora de Historia del Arte de la Universidad CEU San Pablo de Madrid.

En el número de abril –cuya portada ilustra la Orla de flores con la Anunciación, de Carlo Maratta– colaboran, entre otros, el fallecido cardenal jesuita Tomás Spidlík, Julián Barrio Barrio, Javier Salinas Viñals, Klemens Stock, Manuel Iglesias, José María Fernández Lucio o Juan Manuel Sierra López.

En el nº 2.843 de Vida Nueva.

Actualizado
11/04/2013 | 23:39
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