Una nueva etapa

(Camilo Maccise– Ex presidente de la Unión de Superiores Generales)

“Afortunadamente, los recientes nombramientos para los puestos de dirección de la propia CIVCSVA y otros cambios de personal en la misma hacen prever un nuevo tipo de relaciones entre el Vaticano y la Vida Religiosa en la Iglesia. Relaciones de diálogo y colaboración para resolver los problemas que afectan a los religiosos y enfrentar los desafíos del momento actual”

A principios de febrero de este año, tuvo lugar en Roma un seminario sobre la teología de la Vida Consagrada apostólica, su identidad y significado. Una vez más, la Vida Religiosa posconciliar manifestó su búsqueda de caminos de fidelidad creativa a su carisma en una Iglesia de comunión, a pesar de los ataques sistemáticos de que ha sido objeto por parte de autoridades eclesiásticas, que deberían animarla y acompañarla en el cumplimiento de su misión. A las ya clásicas acusaciones de magisterio paralelo, pastoral paralela y desobediencia a los obispos, se añadió como leitmotiv desgastante en tiempos recientes el de su secularización y de adoptar “corrientes demoledoras que llevan a la relajación de la doctrina”.

En ambientes jerárquicos, incluyendo a algunos miembros de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCSVA) y de la Curia romana, la Vida Religiosa posconciliar ya no tendría futuro. La solución sería volver a las formas preconciliares de Vida Consagrada.

Afortunadamente, los recientes nombramientos para los puestos de dirección de la propia CIVCSVA y otros cambios de personal en la misma hacen prever un nuevo tipo de relaciones entre el Vaticano y la Vida Religiosa en la Iglesia. Relaciones de diálogo y colaboración para resolver los problemas que afectan a los religiosos y enfrentar los desafíos del momento actual.

De ese modo, se irán consolidando los vínculos fraternos en una Iglesia de comunión en la que la diversidad de carismas favorece la unidad. Los sufrimientos, las tensiones y las descalificaciones que sufrió la Vida Religiosa posconciliar a causa de prejuicios fuertemente arraigados en las esferas jerárquicas han servido para purificarla y para abrirla a esta nueva etapa de relaciones fraternas con la CIVCSVA.

En el nº 2.744 de Vida Nueva.

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