(José Morales Martín– Girona) El pasado día 27 de octubre el pleno del Congreso de los Diputados rechazó una proposición de ley para que los profesores y maestros sean considerados como “autoridad pública” en el ejercicio de sus funciones. Se proponía de forma muy razonable que las agresiones contra docentes pudieran ser tipificadas como delitos de atentado, con el correspondiente agravamiento de las penas. El PSOE se opuso, en contraste con las declaraciones del ministro de Educación, que ha reiterado su apoyo al profesorado y ha asegurado que el Pacto por la Educación “progresa adecuadamente”.
Pienso que buenas palabras no bastan, y convendría empezar ya a tomar medidas concretas frente a la disciplina y la violencia escolar que, lo conozco por docente, convierten en un auténtico infierno el día a día de muchos profesores. Tengo la sensación de que con este rechazo se ha perdido una buena ocasión de profundizar en el más que necesario Pacto por la Educación.
En el nº 2.682 de Vida Nueva.
