En la boca, para no perder las formas

comunionLos grupos partidarios de la “reforma de la reforma litúrgica” celebran como una gran noticia la decisión del arzobispo de Bolonia de no permitir la comunión en la mano. Esta decisión del cardenal Caffarra, que revoca un indulto de la Conferencia Episcopal Italiana del año 1968, se aplicará solamente en la catedral y en otros dos significativos templos de la archidiócesis ante los “graves abusos” que se habrían detectado, como llevarse las sagradas formas para vender, como simple recuerdo o, incluso, con la finalidad de profanarlas en ritos satánicos. Al mismo tiempo, el cardenal pide a quienes asistan al sacerdote que vigilen que cada fiel, tras recibir el Pan consagrado, lo consuma de inmediato.

Colectivos tradicionalistas consideran que esta medida, la primera que se registra en Italia, es “otro” granito de arena para la “re-sacralización” de la Eucaristía. Y los reclinatorios ya empiezan a reaparecer en los templos…

En el nº 2.660 de Vida Nueva.

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