El papel que deben desempeñar los católicos en política

Jaime Mayor Oreja y José Bono participan en un ciclo de conferencias en Las Palmas

(Juan Martínez Castelblanque) Las Palmas de Gran Canaria acogió la pasada semana el ciclo de conferencias Católicos en Política, que contó con la presencia del ex ministro de Defensa José Bono, el eurodiputado del Partido Popular Jaime Mayor Oreja y el alcalde de Puerto Rosario, Marcial Morales, de Coalición Canaria.

José Bono quitó importancia al posicionamiento de la Conferencia Episcopal Española (CEE) de cara a las elecciones, al considerar que no restará votos al Partido Socialista, ya que “es una opinión que los ciudadanos han escuchado, pero también han recibido críticamente”. Para el ex ministro de Defensa no existe crisis en las relaciones Gobierno-Iglesia, puesto que “si fuese incompatible ser cristiano y socialista habría que cerrar la mitad de las iglesias y de las sedes del partido”. Bono afirmó que el Partido Socialista es una formación “solidaria, sin odio al que tiene, pero que sí está cerca de los que menos poseen”.

El ex ministro de Defensa destacó que cuando entró en política hace 40 años “no ingresé en la Falange ni en la derecha por una motivación religiosa”. Se decidió por el PSOE porque “me parecía que encarnaba el compromiso más acorde con mis convicciones”.

Por su parte, Jaime Mayor Oreja calificó el debate sobre si se puede ser socialista y católico de “absurdo”, porque existen gobiernos socialistas “que pueden hacer una política conforme a los valores cristianos”. Para el ex ministro de Interior del PP la cuestión estriba “en qué tipo de política hace este Gobierno”. Oreja insistió en que “España vive una ofensiva laicista radical, sin comparación con el resto de Europa” y que la actual situación “es una exageración”. Con respecto a las recomendaciones al voto de la CEE, el popular opinó que es la “obligación” de la Iglesia, ya que ésta lo que debe hacer es “orientar”, por lo que lo que “ha hecho está bien”.

Mientras, Marcial Morales defendió la posibilidad de combinar la vida política con los valores del cristianismo, más allá de ideologías determinadas. Afirmó que “ningún partido tiene derecho a arrogarse los valores del Evangelio”. El alcalde de la capital majorera señaló que Canarias ha sido un modelo de buenas relaciones entre la Iglesia y la política: “En la diócesis de Canarias hemos tenido la suerte de haber tenido obispos magníficos, como Antonio Pildain, Ramón Echarren o el actual Francisco Cases Andreu, gente que ha entendido muy bien la política facilitando un modelo de relación coherente entre ambas instituciones, ejemplo de una presencia eclesial abierta al mundo”. El nacionalista canario insistió en que éste es el camino a seguir en las relaciones Iglesia-Estado, “un camino que pasa por no sacralizar ninguna opción, sino aportar unos valores cristianos que coinciden en mucho con la Declaración de Derechos Humanos, y que, por supuesto, no deben ser confrontados con la sociedad civil y su articulación política”.

El ciclo estuvo organizado por el Aula Manuel Alemán de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, que dirige el sacerdote y teólogo José Alonso, quien manifestó su desacuerdo con que la Iglesia católica no pueda hablar de política, aunque sostuvo que se debe limitar a ofrecer orientaciones para que los cristianos decidan en conciencia.

Para el director de las Jornadas, “la política no es sólo la pertenencia a un partido o el estar adscrito a una plataforma, sino que es una labor de construcción social. Alonso considera que “se ha de buscar humanizar. La labor de los católicos no es ofrecer un modelo, sino aportar los valores provenientes del Evangelio a la construcción social”.

Compartir