Ejemplo nada ortodoxo

Monjes griegos ortodoxos y cristianos armenios se enzarzaron el pasado día 9 en una pelea en el Santo Sepulcro de Jerusalén, que requirió la intervención de la policía israelí y acabó con varios detenidos. El templo, ubicado donde según la tradición murió y resucitó Jesús, es uno de los lugares de Tierra Santa que más peregrinos acoge a diario y el gran escenario ecuménico por excelencia. No en vano, allí conviven desde siempre las diferentes confesiones cristianas.

Que en una región tan necesitada de paz se produzcan este tipo de sucesos, con la religión como telón de fondo, no deja de ser un ejemplo poco edificante, nada ortodoxo.

En el nº 2.636 de Vida Nueva.

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