Decíamos ayer (15 de septiembre de 1979)

Trabajo común

“España tiene ante sí una de las tareas más profundas, apasionantes y difíciles de su historia. Y, dentro de España, los creyentes tenemos un lugar de trabajo común. Un trabajo tremendo que no culminará decentemente sólo con palabras, defensas e inercias. La impresión general es que nadie sabe muy bien lo que quiere y lo que debe hacer. Ojalá sea una falsa impresión. Urge un planteamiento a fondo de todo. Sin desmontar alegremente, frívolamente, un tinglado que tiene cosas válidas. Sin querer partir de cero. Habrá que partir de 2 o de 3, pero acaso haya que borrar otros guarismos”.

En  el nº 2.674 de Vida Nueva.

Compartir