Editorial

Europa, ante el espejo de sus raíces

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EDITORIAL VIDA NUEVA | Recuperar su esencia para no desnortarse. Una y otra vez, Juan Pablo II y Benedicto XVI instaron a Europa a mirarse en el espejo de sus raíces cristianas y, con ellas, poder construir un continente que promueva esa fraternidad inicial.

En el 60º aniversario del Tratado de Roma, Francisco ha animado a los líderes de una Unión Europea todavía conmocionada por el Brexit del Reino Unido, a recuperar esas bases políticas, jurídicas y sociales donde el centro sea la persona y su dignidad.

Todos saben que no es el mejor momento para la Unión Europea, pero no basta con ser conscientes de esta fragilidad. Es hora de tomar decisiones para rescatar el espíritu de solidaridad europea, atendiendo a los signos de los tiempos. Es aquí donde Francisco retoma –aún con más fuerza si cabe– el llamamiento de sus predecesores a “redescubrir la memoria viva” como “savia vital que irriga el presente”.

Está en manos de los presidentes y primeros ministros configurar una Europa de los pueblos por encima de la Europa monetaria que, como estamos viendo, corre el peligro de levantar muros y acabar a la deriva, fruto de los vaivenes económicos, o de ser finiquitada por populismos excluyentes.

Publicado en el número 3.030 de Vida Nueva. Ver sumario

 


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