CHILE – Obispos chilenos con el Papa

Visita ad limina en período de cambios de obispos en tres grandes diócesis

Durante los últimos días de febrero, los obispos chilenos estarán en Roma para cumplir la norma canónica de dar al Papa, cada cinco años, una relación completa del estado de cada diócesis. El jueves 23 será esta audiencia con Francisco, complementada en los días anteriores y posteriores con entrevistas en otros organismos vaticanos. Es también un tiempo de compartir entre ellos.

Antes de llegar a Roma los obispos estarán en Asís para un retiro espiritual predicado por el franciscano Cesare Vaiani, desde el 15 al 19 de febrero. También tienen prevista para el domingo 26 una misa con la comunidad de chilenos residentes en Roma en la iglesia Santa María de la Paz.

El presidente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), Santiago Silva, señaló que este viaje “no solo es la presencia en Roma de un grupo de obispos, se trata de la presencia de la Iglesia que vive su fe en Chile. Es decir, de todos los católicos que aquí en Chile creemos en Jesucristo y tratamos de construir una sociedad nueva”.

Por su parte, Cristián Contreras Villarroel, obispo de Melipilla y vicepresidente de la CECh, se refirió al proceso de elaboración del informe quinquenal con el que cada diócesis debe dar cuenta de su realidad particular, señalando que permite trabajar en comunión con los colaboradores, “en perspectiva de oración, ha sido un trabajo muy hermoso” que permite mirar los logros y aquellos aspectos en los que se debe avanzar.

La tradición de este encuentro de comunión eclesial se inició en 1585 cuando el papa Sixto V publicó la constitución Romanus Pontifex. Fue complementada por Benedicto XIV en 1740 y desde 1909 rige la actual normativa promulgada por Pío X que indica a cada obispo dar al Papa una relación completa de la condición religiosa y moral de su diócesis y un informe sobre el progreso de la fe desde la última visita ad limina, aportando datos estadísticos y análisis de una enorme diversidad de temas específicos que, en conjunto, cubren la totalidad del quehacer pastoral y religioso de la Iglesia.

Nuevos nombramientos

Tanto en las entrevistas con el papa Francisco como en las que sostengan en los diversos dicasterios, es posible que esté presente la situación en dos arquidiócesis, Antofagasta y Santiago, y la diócesis de Rancagua, con obispos renunciados por tener cumplidos los 75 años y cuyo reemplazo provocará movimientos al interior del episcopado. De ellas, Santiago es la que suscita más especulaciones, algunas de las cuales señalan como candidatos a los actuales arzobispos de Concepción, Fernando Chomalí, y de La Serena, René Rebolledo; y a Santiago Silva, presidente de la CECh.


En pocos meses más también el arzobispo de Puerto Montt, Cristián Caro, debe renunciar al cumplir la edad límite. Estas diócesis parecen requerir el traslado de un obispo con experiencia dejando vacante su sede a la que podría llegar uno nuevo. Sin embargo, los nombramientos de los últimos años dan la impresión de no haber sido fáciles, sobre todo por el perfil de los candidatos que busca el actual Nuncio Apostólico, Ivo Scapolo.

Además, siendo éste un año de elecciones parlamentarias y presidencial en Chile, no sería extraño que se posterguen estas decisiones. Desde ya, Ezzati a fines de enero, en carta dirigida a su clero, les expresa que “el Santo Padre me ha pedido seguir en el cargo de manera indefinida, lo que buscaré hacer con la misma disponibilidad de siempre, seguro de la oración y fraterna comunión de todos ustedes”.

Muchos católicos manifiestan su esperanza de que esta podría ser ocasión para dar al episcopado chileno más integrantes que lo renueven en la línea del papa Francisco, pastores con un estilo más abierto al clamor de la humanidad, “testigos del Resucitado, humildes y valerosos” como él lo ha expresado.
ROBERTO URBINA AVENDAÑO. SANTIAGO

 

Compartir