La Rota exige a España que cumpla la reforma de la nulidad

Pio Vito Pinto, decano de la Rota Romana

Pio Vito Pinto: “Los obispos que dicen que no hay demandas es porque siguen instaurados en el viejo sistema”

Pio Vito Pinto, decano de la Rota Romana

Pio Vito Pinto, hace unos días en Madrid

Pio Vito Pinto: “Los obispos que dicen que no hay demandas de nulidad siguen en el viejo sistema” [extracto]

RUBÉN CRUZ | El próximo 8 de diciembre se cumple un año de la entrada en vigor de la reforma de los procesos de nulidad matrimonial. “Los obispos españoles deben reflexionar sobre su aplicación. El papa Francisco dijo que esta nueva normativa sustituye toda la anterior, sin excepción. Por lo tanto, el Tribunal de la Rota de Madrid también debe acogerse a ella”. Tajante y sin rodeos. Así responde a Vida Nueva Pio Vito Pinto al ser preguntado sobre la aplicación en España del motu proprio Mitis Iudex Dominus Iesus.

El decano de la Rota Romana abrió el pasado 28 de noviembre las jornadas de formación Discernimiento y acompañamiento de los casos de nulidad matrimonial, organizadas por la Conferencia Episcopal Española y la Universidad Eclesiástica San Dámaso. “La voz más autorizada en esta materia”, como se refirió a él Roberto Serres, decano de la Facultad de Derecho Canónico de San Dámaso, sostiene que “cuando los obispos dicen que no hay ninguna solicitud de nulidad es porque siguen instaurados en el viejo sistema”.

Según Vito Pinto, “hasta ahora, la nulidad solo la pedían unos pocos”. Pero “Francisco sabe que hay miles de fieles que no la han pedido aun pudiendo tenerla. Y la Iglesia debe ser madre, buscar a estos hijos, permitirles esta nulidad, más aun cuando los fieles quieren volver a casarse”. Y aquí son “los obispos” los que tienen “la misión de ir a buscar a los ausentes”.

El cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, tomaba notas mientras hablaba Vito Pinto, para luego subrayar que “hay que acercarse a las situaciones reales de la familia hoy, sin discriminar, como hacía Jesús”. Destacó la claridad de las palabras del italiano y “la importancia para la vida de la Iglesia de estas jornadas sobre el motu proprio con el que el Papa ha querido decirnos que la Iglesia tiene que estar en las distintas realidades, no al margen, sin enterarse”.

Buscar a los alejados

Vito Pinto demostró buen humor pero también fue vehemente durante su ponencia, que llevaba por título El nuevo proceso de nulidad matrimonial en el contexto de la atención pastoral a los matrimonios fracasados: las aportaciones del papa Francisco, ante vicarios judiciales, miembros de los tribunales eclesiásticos, abogados, párrocos y otros agentes de pastoral familiar. De igual forma se mostró ante las preguntas de esta revista.

PREGUNTA.- ¿Era necesario ser tan tajante?

RESPUESTA.- Se debe hablar vehementemente porque los vicarios judiciales son los actores principales de esta causa. Deben ser asistentes, importantes y absolutamente necesarios, de los obispos. Hasta este momento los vicarios judiciales eran los únicos actores, pero lo que se necesita ahora es que haya una sinergia entre unos y otros para que puedan atender todas las exigencias, por ejemplo, de una archidiócesis como la de Madrid. Y esta unión debe contemplar también a los párrocos, porque en las parroquias es donde están las familias. El gran espíritu de esta reforma es el de buscar a aquellos que están lejos.

P.- Hace unas semanas publicamos una información sobre un vicario judicial de una las diócesis más grandes de España que se niega a llevar a cabo los procesos por la vía breve. A su juicio, el ‘motu proprio’ de Francisco no se ajusta a la realidad…

R.- El Papa tiene mucha paciencia. Él no presiona, sino que convence. La Iglesia no es una cárcel, es una casa. Hay personas que piensan como este vicario judicial, pero el Papa lo que hace es invitar a que se acoja este cambio. Hay personas que tardan más tiempo en aceptarlo y otras personas que tardan menos. Jesucristo es samaritano, también con estas personas que aún no se han abierto. Es necesario orar a este Cristo samaritano para que toque el corazón de estos sacerdotes.

¿Resistencias o dificultades? “Irán remitiendo”

El decano de la Rota es sabedor de que la reforma, que es la más importante de la historia en esta materia, tardará tiempo en instaurarse por completo. ¿Se ha encontrado mucha resistencia? “No sé si hablar de resistencia o de dificultad, que son cosas diferentes. Pero el Papa tiene fe en que los altos cargos de la Iglesia, los obispos, responden ante Dios. Por lo que, con el tiempo, las dificultades irán remitiendo”.

Las diócesis españolas han visto duplicadas e incluso triplicadas, en algunos casos, las demandas de nulidad tras la reforma. Este aumento deja patente que era esperada por los fieles. “Era muy esperada, pero hay lugares en los que más y otros en los que menos, como es normal. Su aplicación depende de los obispos, los vicarios judiciales y los párrocos”, explicó. Así, Vito Pinto considera primordial que los párrocos sean formados para atender estas situaciones familiares complejas.

Vito Pinto también se expresó sobre Amoris laetitia. En concreto, en relación a la comunión a divorciados. “Es una realidad que se da tanto en una diócesis del Caribe como en la de Roma, donde Francisco es obispo. Lo único que ha hecho es poner negro sobre blanco una realidad”, afirmó.

Al mismo tiempo, ante las denominadas situaciones irregulares, se preguntó: “¿Qué hacemos? ¿Ponernos en la puerta de la parroquia y decir: tú sí, tú no?”. Francisco no enseña esto, porque “tiene un amor profundo por los descartados de la Iglesia”.

“Si un cardenal no está conforme con Francisco debería dimitir”

“A Francisco no pueden acusarle de gobernar la Iglesia solo, como dicen algunos. La sinodalidad del Papa es indiscutible. Dos sínodos lo avalan. Y más de dos tercios lo apoyaron”. Tampoco Vito Pinto pasó por alto el desafío de cuatro cardenales al Papa, con la publicación de una carta pública en la que le pedían explicaciones por Amoris laetitia. Y es que “algún cardenal necesita volver su mirada hacia Pedro”. Pese a que el Papa no ha respondido, “indirectamente les ha dicho que son cardenales de negro o blanco, y existen muchos colores”.

PREGUNTA.- Durante la ponencia ha hecho una ferviente defensa tanto de la reforma como del papado de Francisco…

RESPUESTA.- Defiendo los hechos. Yo he visto y sé distinguir dónde está realmente el amor a Cristo, y en Francisco lo veo. En este sentido, creo que soy un privilegiado, porque conociendo esta enorme fuerza humana del Papa, no se puede no escucharle. Porque no habla para sí, para los suyos, sino que busca a los que están lejos. Creo que aquellos que piensan que no es fácil deberían hacerse esta pregunta delante del crucifijo: “Yo, ¿a quién debo buscar, de quién soy ministro?”. Soy ministro de Cristo samaritano, el cual no se contenta solo con algunos, sino que quiere acoger a tantos miles que están lejos.

P.- ¿Cuatro cardenales representan a la Iglesia?

R.- Absolutamente no. La Iglesia es una comunión, un colectivo. Entiendo que si alguien no se siente conforme con estas nuevas decisiones, debe decir: “Yo dimito, porque no estoy de acuerdo”. El Papa es el sucesor de Pedro, que debe gobernar junto a este colectivo, pero esto no quiere decir que necesite su defensa. Ningún papa se ha acercado tanto al colegio episcopal como Francisco, y con las cosas que está haciendo no necesita más reafirmación que su propia alma, que sus actos y lo que demuestra con ellos.

P.- Son muchos los que piensan que parte de la Curia está en contra de Francisco. El ala más conservadora, por llamarla de algún modo…

R.- Estás muy bien informado. Son muchas causas, no solo el hecho de ser más conservadores. Una de las grandezas de Francisco es que tiene una gran paciencia. Y, por supuesto, reza por ellos.

Publicado en el número 3.014 de Vida Nueva. Ver sumario

 


LEA TAMBIÉN:

Compartir