En el centro, el padre Mauricio Galeano, presidente de CONACED, durante una de sus visitas a los colegios
Entrevista con Mauricio Galeano, presidente de CONACED
Con 78 años de existencia, la Confederación Nacional Católica de Educación (CONACED) reúne a cerca de 800 colegios en Colombia. Entre sus tareas prioritarias, profundiza la identidad formativa de las instituciones, capacita a maestros y a directivos, y abre caminos para gestión ante las instancias del Estado.
La versión número trece del congreso nacional de educación católica organizado por CONACED este año giró en torno al tema de educación y paz, un asunto al cual también se refirió Mauricio Galeano, presidente de la confederación, en conversación con Vida Nueva, recientemente. Según el dominico, el momento que vive el país abre a una toma de conciencia de la importancia de una paz que invite al consenso y permita una consideración de posturas en un contexto cada vez más amplio. “La paz tiene que ser fruto de la justicia”, afirma, mientras subraya el trasfondo teológico que, a su parecer, puede aportar la tradición cristiana por estos días. La paz es, según indica, don y constructo social; desde la fe, involucra la búsqueda de sentido y de una razón última de las cosas.
La contribución de la escuela católica, a su parecer, reside en proponer una formación fundada en la integralidad del ser humano. Cuando el discurso de la calidad educativa se cierra en torno al ámbito de lo científico y de lo cultural, CONACED plantea una visión de la realización personal que incluye, además de lo cultural y lo científico, la esfera de la sociabilidad, la convivencia, la lúdica, el arte y la espiritualidad. “No hay nada más cautivo que una educación sin trascendencia”, afirma Galeano, al tiempo que destaca que la fe determina el compromiso con el presente y la capacidad de sembrar de cara al futuro.
Entre los desafíos que identifica el presidente de la confederación, destaca la articulación entre la escuela y la misión formativa de los padres de familia frente a sus hijos. Una reciente controversia entre el DANE y la institución da cuenta de esta preocupación. CONACED manifestó reparos frente al tipo de formulación de algunas preguntas que hacen parte de la Encuesta de Comportamientos y Actitudes sobre Sexualidad en niños, niñas y adolescentes en los colegios. Esto llevó a que el Departamento Administrativo Nacional de Estadística suspendiera temporalmente la aplicación de la encuesta con el objetivo de evaluar alternativas en el uso del lenguaje. Según Mauricio Galeano, CONACED no rehúye el tema de la formación en la sexualidad de los niños, sino que busca que la cuestión involucre la opinión de los educadores y de los padres de familia. En este contexto, la confederación participa de un diálogo con el DANE y el Ministerio de Educación para que sus consideraciones sean tenidas en cuenta.
La escuela católica se piensa como una aliada de las familias y subraya la misión que estas tienen en la formación cristiana de sus hijos. Por estos días, CONACED también mantiene en pie una bandera compartida con algunos sectores cristianos que exigen respeto a la libertad religiosa, aduciendo que se les quiere imponer lo que ellos denominan “ideología de género”. “Los padres tienen derecho a elegir la educación que quieren para sus hijos y nosotros, como instituciones educativas, tenemos el derecho a establecer el tipo de formación que queremos brindar, desde nuestros valores y principios formativos, humanos y cristianos”, sostiene Galeano.
VNC
