ARGENTINA – “Hay que cuidar a los pibes”

La Comisión Nacional de Pastoral de Drogadependencia reclama una emergencia nacional de adicciones.

En una carta corta pero expresiva, en febrero de 2015, el papa Francisco transmitía su preocupación por el avance del narcotráfico en la Argentina al legislador porteño Gustavo Vera: “Ojalá estemos a tiempo de evitar la mexicanización”, advertía Bergoglio. Como si fuera una profecía del Pontífice, a menos de un mes del asesinato de los tres sacerdotes mexicanos en manos de carteles del narcotráfico, la gente que conoció al padre Juan Viroche asegura con certeza que al cura argentino lo mataron por denunciar el avance de la droga en Tucumán.

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Un mes mas tarde, la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones y Drogadependencia de la Conferencia Episcopal Argentina realizaba su III Encuentro Nacional en la casa salesiana Domingo Savio de la ciudad de Ramos Mejía, Buenos Aires. Al cerrar este encuentro, el domingo 6 de noviembre, convocaron a una conferencia de prensa para presentar la declaración Emergencia Nacional: Ni un pibe menos por la droga.

Con la representación de todas las regiones pastorales en que se divide la Iglesia argentina, José María “Pepe” Di Paola , sacerdote coordinador de esta Comisión Nacional, junto con los delegados diocesanos de esta Pastoral, leyeron la declaración. “La situación es desesperante”, anuncia el escrito, que al mismo tiempo interpela: “En los centros urbanos estamos discutiendo modos novedosos de intervenir, organizando congresos y analizando las falencias de los distintos paradigmas y modelos teóricos, muchas veces importados, y la respuesta sigue siendo insuficiente, mientras hay cerca de un millón de jóvenes que no estudia ni trabaja en nuestro país.”

“Advertimos que –asegura la declaración– la respuesta que se sigue dando es con un acentuado enfoque en la dimensión represiva hacia los sectores más vulnerables. Basta comparar el presupuesto del Ministerio de Seguridad con el de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) para comprender la desproporción de la que estamos hablando”.

Y enseguida ofrece una fundamental clave de lectura de la realidad: “Si a nuestros jóvenes no les ofrecemos oportunidades reales para crecer, para descubrir el sentido de la vida, políticas públicas de prevención y un sistema de salud adecuado, van a ser estructuralmente vulnerables”. Y denuncia: “No alcanza con perseguir al narcotráfico, hay que cuidar a los pibes.”

Esta Comisión Nacional define al narcotráfico como “una red multinacional con gerentes y CEOs”, y describe que los narcotraficantes “saben tanto de complicidades políticas como de comunicación, de maquillar la realidad con teorías novedosas surgidas en universidades prestigiosas, de hacer lobby y buscar leyes favorables a sus negocios”.

 

¡Basta! ¡Basta!

La declaración Emergencia Nacional: Ni un pibe menos por la droga manifiesta expresamente no estar de acuerdo “con las políticas liberales que reclaman el derecho de cultivar, tener o consumir drogas” y reconoce “la situación dramática de niños y jóvenes que padecen epilepsia refractaria y que encuentran en un derivado del cannabis el paliativo a sus dolencias. Entendemos que es imprescindible que quienes padecen esta enfermedad puedan tener su medicina, y que corresponde al Estado proveerla gratuitamente.”

Y concluye: “Este equipo pide la pronta declaración de la emergencia nacional de adicciones, y reclama a los distintos niveles del Estado: municipales, provinciales y nacional, a los medios de comunicación, a las empresas, a las iglesias y distintos credos que se hagan eco de este pedido, que como un grito que se eleva al cielo de la patria: ¡Basta! ¡Basta! ¡Ni un pibe menos por la droga! Hay que ponerse a trabajar.”

Al finalizar la lectura de esta declaración, Di Paola tomó la palabra y enfatizó: “hablamos de regiones del país muy diferentes, pero todas tienen una necesidad en común”. Y reclamó: “por eso pedimos que se declare la emergencia nacional de adicciones”.

El sacerdote se refirió a los cientos de jóvenes de la Argentina que “hoy están esperando una respuesta del Estado y de las instituciones”, y hace extensiva la invitación “para que todos trabajemos en este tema… ¡Queremos una emergencia nacional de adicciones!”.

NICOLÁS MIRABET. BUENOS AIRES

 

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