Lleida reclama “costes de conservación” por los Bienes de Sijena

JOSÉ LORENZO | Poco se podrían imaginar las religiosas sanjuanistas de la Orden de Malta que, 32 años después de iniciar la venta en tres fases de las 96 obras de arte hoy conocidas como los Bienes de Sijena, aquellas transacciones no solo batirían el récord de mayor tiempo de deliberación sobre sus aspectos jurídicos en el Tribunal Constitucional (14 años), sino que las propias monjas podrían sentarse en el banquillo por la denuncia que acaba de admitir a trámite un juzgado, y por la cual el Museo Diocesano de Lleida les reclama los gastos de conservación desde 1999.

Según una nota de prensa, el museo, que tiene las obras en depósito cedidas por el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), retendrá las 44 piezas hasta que no se abonen los costes por los “importantes gastos de mantenimiento y conservación” antes de que se ejecute cualquier traslado.

Esta noticia se ha conocido una semana después de que, el 2 de noviembre, un juzgado de Huesca haya dado un plazo de veinte días a la Generalitat catalana y al MNAC para comunicar cómo y quién llevará a cabo el traslado de las pinturas murales que aún se encuentran expuestas. El auto requiere también al Gobierno aragonés que informe al juzgado de las condiciones estructurales y climáticas de la Sala Capitular del monasterio oscense de Sijena, lugar que albergarán las obras en litigio y adonde ya llegaron, en julio pasado, 53 piezas desde el MNAC.

Sin embargo, desde la Generalitat se considera que la decisión de trasladar las piezas que faltan “es un despropósito”. “No tiene ningún sentido, y menos cuando estamos inmersos en un procedimiento judicial que todavía no ha finalizado”, ha señalado Neus Munté, portavoz de la Generalitat de Cataluña. “Las pinturas corren un riesgo elevado si fueran trasladas”, añadió.

Este litigio se ha ido enredando con los años por cuestiones políticas entre ambas comunidades. Una parte de las obras de arte fueron protegidas por una ley de patrimonio (al igual que sucede con los Bienes de la Franja), razón por la cual la Generalitat aduce que están sometidas a la legislación catalana. Entre ellas, las 44 que se exhiben en Lleida.

Publicado en el número 3.011 de Vida Nueva. Ver sumario

 


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