Sergio Scariolo: “Valoro el bronce olímpico como el oro”

Seleccionador nacional de Baloncesto

Sergio Scariolo, seleccionador nacional de Baloncesto

ÁNGELES LÓPEZ | En su carrera como seleccionador de la ÑBA suma tres oros europeos, una plata olímpica y el último bronce de Río. En mayo de 2015, Sergio Scariolo regresó al cargo, tras un paréntesis de dos años y medio, para ayudar a la mejor generación del baloncesto español a coronar su leyenda en la última Olimpiada. El equipo cumplió la expectativa bajo el amparo de un seleccionador en plenitud, que es, simplemente, el mejor seleccionador español de la historia.

PREGUNTA.- Se hartó de repetir durante los Juegos que iban con el objetivo de lograr una medalla y se la han traído colgada. ¿Misión cumplida?

RESPUESTA.- Es el sueño máximo de cualquier profesional. Lo logramos después de un partido difícil. El valor de esta victoria es enorme por lo difícil que nos lo puso nuestro adversario, literalmente, hasta el último segundo. Valoro este bronce como los oros y las platas que hemos logrado.

P.- Sobre Pau Gasol le han preguntado muchas veces, ¿queda algo por añadir?

R.- Su forma de ser es uno de los grandes secretos de su éxito, de nuestro éxito. Cuando un entrenador tiene como líder a una persona respetuosa, educada, que valora sus decisiones y así se lo transmite a sus compañeros, es una bendición. Pau, con la Selección, ha vivido muchos de los mejores partidos de su carrera. Todos estamos contentos de ayudarle con un bloqueo, un pase, un consejo… Pensamos que se lo merece: sabe ser líder con extrema clase y educación.

P.- ¿Qué legado dejará esta generación “de amiguetes”, como los define la prensa?

R.- La aparición de este grupo de jugadores supuso un antes y un después para el baloncesto y para todo el deporte. Cuando llegué a España, encontré un alto nivel de calidad y un bajo nivel de competitividad. Ellos unieron la capacidad de hacer deporte de alto nivel de forma estética y vistosa con la capacidad de ganar. Incorporaron la dureza competitiva, la capacidad de aguantar los momentos complicados, el espíritu de equipo. Esas virtudes no estaban antes y ahora se han extendido a otras disciplinas, en buena parte gracias a la inspiración de este grupo.

P.- Su mujer ha sido jugadora de baloncesto, ¿le da consejos con la Selección?

R.- Aunque no lo creas, de vez en cuando sí.

P.- ¿Le echa broncas por las tácticas que elige?

R.- Ella no, pero mi hijo sí.

P.- Preside una fundación, ¿me explica algo más?

R.- Fue tras el fallecimiento de mi padre. Me quedó la inquietud de poder centrar el esfuerzo de ayuda hacia los menos afortunados en una única dirección, pues hasta el momento siempre que habían solicitado de mi apoyo para diferentes causas lo habían tenido. Desde la Fundación Cesare Scariolo ayudamos a niños con enfermedades oncológicas y a sus familias, teniendo en cuenta la dimensión de nuestra estructura, atendiendo desde lo social, económico, psicológico, etc.

P.- No sé si me permite preguntarle si es creyente…

R.- No tengo problema: sí lo soy, aunque como la mayoría de los católicos, no soy muy practicante.

P.- El papa Francisco, ¿qué opinión le merece?

R.- Me parece un hombre justo, sensato y aire fresco para el Vaticano. Confío en que pueda llevar a cabo todo aquello que desea. Sería bueno para la Iglesia, los católicos y el mundo.

P.- Decía hace meses que después de los Juegos le gustaría probar en la NBA. ¿Sigue con ese pensamiento?

R.- Hay un par de situaciones que podrían convertirse en oportunidad, pero es un paso que, en el punto de mi trayectoria y de mi vida personal en el que me encuentro, habría que dar si se presenta la oportunidad. Un chaval de 20 años puede permitirse ir a la NBA casi sin condiciones, porque conlleva un salto en su trayectoria. En mi caso, tengo que valorar más factores. –Al cierre de esta entrevista, Scariolo está cerca de estampar su firma para renovar el contrato–

Dicto sentencia

Lleva veinte años viviendo en España, en concreto, en Marbella: “Tiene mucha calidad de vida y posibilidades para una familia con hijos como la mía. Estamos muy bien allí”.
“Me dedico a la familia, a practicar deporte, a mis amigos y sobre todo por la noche a ver cine, leer libros, estar relajado. No soy mucho de salir por las noches”.

Publicado en el nº 3.002 de Vida Nueva. Ver sumario