En el sacramento de la reconciliación entran en juego muchos elementos, pero el fundamental es “la actitud que tiene que tener el sacerdote para los que vienen a recibir el sacramento”, señaló el sacerdote Gustavo Ribero, director de Obras Misionales Pontificias (OMP) de Postosí, en un encuentro sobre liturgia celebrado en Bolivia.
Los tres primeros días de marzo se llevó adelante el Encuentro Nacional de Delegados Diocesanos de Liturgia en la arquidiócesis de Cochabamba, con el sacramento de la reconciliación y el perdón como tema central. En ese marco, Ribero realizó su presentación titulada Iconografía de la Reconciliación cristiana y estética de la celebración de sacramento del perdón. Fue en ella que remarcó como central la actitud del sacerdote. La acogida, el carácter paternal y la generosidad del tiempo fueron algunas de las predisposiciones que señaló como más importantes a la hora de recibir a la persona. También afirmó necesaria la existencia de una política de recibir a la gente, que exista en todas las parroquias un espacio en el que los creyentes puedan confesarse y que este sea “bastante prolongado”.
Ribero manifestó su deseo de que este Año de la Misericordia sirva para fortalecer este ámbito de la vida cristiana que es el sacramento de la reconciliación, y que este tiempo sea efectivamente un “oasis” en el que la Iglesia pueda reflexionar sobre su importancia, como lo pretende el papa Francisco.
Asimismo, afirmó que es “imprescindible y necesario” que los delegados de liturgia de Bolivia se reúnan luego del Congreso Eucarístico Nacional que fue realizado en Tarija en septiembre del año pasado. “Es vital reflexionar sobre los alcances que tuvo el congreso y sobre cómo aplicarlo en la vida de la iglesia boliviana”, consideró Ribero
R.P. COCHABAMBA
