Bolivia: “No se están pidiendo caudillos sino partidos políticos”

El referéndum, un llamado de atención para el Gobierno y para la oposición

Una histórica jornada democrática han vivido los bolivianos el domingo 20 de febrero al participar del referéndum para la reforma de su Constitución para permitir al presidente Evo Morales volver a presentarse a las elecciones en 2019 y así aspirar a mantenerse dos décadas en el Poder Ejecutivo.

Con un 99,72 por ciento de los votos escrutados, el No se impuso con el 51,31 por ciento de los votos frente al , que apenas alcanzaba el 48,69 por ciento, según datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE). Este escenario muestra una situación irreversible, tirando por tierra la eventual reelección del presidente Morales.

Frente a los primeros resultados, el Gobierno boliviano había interpretado el contenido de las encuestas como un “empate técnico” y pidió a la oposición que no celebrara una victoria anticipada y esperara a los resultados definitivos oficiales.

Además, Morales propuso discutir el tema de las redes sociales porque, a su juicio, la mala información difundida en ellas puede tumbar gobiernos. En conferencia de prensa, manifestó: “Tal vez en el futuro será importante debatir este tema de las redes sociales, en algunos países con mala información tumban gobiernos, perjudican a su país si hay confrontación”.

Lo que dicen los resultados

Evo Morales está en el poder desde 2006. Si en el referéndum ganaba el Si, hubiera podido reformarse el artículo 168 de la Constitución y se hubiera presentado nuevamente con candidato a presiente en 2019. En caso de haber ganado esos comicios, hubiera permanecido en el poder hasta 2025, es decir, casi veinte años de forma consecutiva.

“Más allá de los resultados finales, ha quedado demostrada una vez más la vocación y madurez democrática del pueblo boliviano en ocasión del referéndum constitucional. La ciudadanía ha sido protagonista por su participación, clima de serenidad y mensaje que deja a nuestros políticos”. Esta afirmación la hizo Juan Carlos Núñez, director de la Fundación Jubileo, a Radio Iglesia Viva, un día después de la elección, sin aún datos concretos.

Esta elección ha demostrado que “el estilo de gobierno de Morales, en cuanto a una hegemonía” ya no es lo que la gente quiere. Pero también ha demostrado “una ausencia de una expresión organizada de oposición”, señaló Núñez.

Además, refiriéndose a las palabras del propio presidente, “el que tenga un voto más es el que va a ganar, por eso no podemos hablar de un empate técnico”, sostuvo.

“Esta expresión del pueblo –declaró– está indicando tanto al gobierno como a la oposición un cambio estructural en su forma de hacer política. Eso no solo tiene que ver con personajes sino con estructuras. ¡Cuán importante se está convirtiendo en Bolivia la institucionalización de partidos políticos que en la democracia son imprescindibles!”.

Con muy buen sentido del análisis y la reflexión, Núñez sostuvo que la oposición en Bolivia “ya no está pidiendo caudillos sino partidos políticos y programas de gobierno. Ojalá que en 2019, cuando vayamos a las elecciones presidenciales, tengamos partidos políticos constituidos y líderes que sepan interpretar las necesidades del pueblo”.

El director de la Fundación Jubileo también se refirió a los “dirigentes vecinales, sindicales y sociales”. Consideró que muchos de ellos, “a través de la presión pretenden mover a la gente; este referéndum es una muestra de que la población dice ‘basta’. Es otro mensaje para los movimientos sociales tan afectadas por la corrupción, por la cooptación de dirigentes por las estructuras gubernamentales. Hay necesidad de reestructuración de los movimiento sociales para que sean genuinas expresiones de los sectores a los que representan”.

Cita con la democracia

Días antes de la elección, el miércoles 17 a primera hora, el secretario general de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), Aurelio Pesoa, dio a conocer un mensaje del episcopado denominado Cita con la democracia, en donde llamaban “a ejercer un derecho y un deber ciudadano, participar del referéndum constitucional para emitir nuestro voto en total libertad y de acuerdo a una recta conciencia”. Y sostuvo: “Se trata de un asunto muy importante que va más allá de las personas concretas y de los intereses particulares, ya que lo que se consulta es la posición del ciudadano sobre el cambio del artículo 168 de la actual Constitución Política del Estado para abrir la posibilidad de elegir por tres períodos consecutivos al presidente y al vicepresiente del Estado Plurinacional de Bolivia”.

Pesoa prosiguió: “La CEB apela una vez más a la votación democrática del pueblo boliviano y anima a toda la ciudadanía a participar de este proceso democrático con libertad, conciencia y responsabilidad como condiciones indispensables para salvaguardar la democracia”.

El secretario general –como vocero del episcopado boliviano– concluyó el mensaje con un llamamiento “a las personas de buena voluntad” a que permanezcan “en actitud de vigilancia” y a “unirse en oraciones al Señor de la historia para que ilumine nuestras mentes, fortalezca las conciencias pacífica y bendiga a Bolivia”.

R.P. LA PAZ

 


 

 Incidentes en El Alto

El mismo día en que la CEB presentaba el mensaje Cita con la democracia, en la Alcaldía de El Alto (el bastión político de Evo Morales) un grupo de padres de familia se manifestó para pedir mejores infraestructuras para las escuelas de la zona a donde asisten sus hijos. La marcha se desmadró y estalló la violencia. Un grupo de manifestantes, ingresó al edificio público y comenzó a incendiar papeles y muebles. Muchos empleados de la Alcadía han podido escapar del fuego, pero hubo seis que han fallecido a casusa de la intoxicación con dióxido de carbono.

El viceministro de Régimen Interior, Marcelo Elío, denunció: “Es un plan orquestado desde dentro de la Alcaldía, hemos visto diputados de Unidad Nacional azuzando para que se pueda generar este plan macabro. Es un plan que se ha urdido desde la derecha de Unidad Nacional y Sol.bo, se ha echado inclusive agua hirviendo a los manifestantes”, remarcó a la prensa boliviana. Y culpó a la alcaldesa Soledad Chapetón como generadora de este “lamentablemente plan macabro”.

Por su parte, Chapetón denunció a la prensa que los documentos quemados forman parte de los procesos que sigue ese municipio a ex autoridades “por delitos de corrupción”. Dijo que esa acción “fue deliberada para destruir esos documentos con los que se está juzgando a ex funcionarios del Movimiento al Socialismo”.

El Consejo Episcopal Permanente de la CEB, reunido en Santa Cruz de la Sierra, el 19 de febrero emitió un mensaje en el que lamentó “profundamente” la muerte de las seis personas y los heridos. “Elevamos nuestras oraciones para que Dios acoja a las víctimas y consuele a sus familiares…”, aseguraron.

“Como Iglesia, condenamos el recurso a la violencia como acto cobarde e irresponsable que siempre tiene consecuencias dolorosas y funestas (…) Asimismo, rechazamos el clima de instrumentalización política que rodea estos acontecimientos y condenamos las actitudes inmorales de los que intentan sacar rédito partidista de una tragedia humana”.

Compartir