CHILE: Una fiesta de fe y alegría

La diócesis de Rancagua celebró sus 90 años

rancagua

Una catedral llena de fieles representantes de los seis decanatos recibió con aplausos a los sacerdotes y diáconos permanentes que acompañaron al obispo de Rancagua, Alejandro Goic Karmelic, al ingresar al último de los seis encuentros que se realizaron en la diócesis para celebrar sus 90 años, el pasado domingo 18 de octubre. Antes, cada decanato había tenido su celebración con sus propias expresiones de identidad cultural, los que culminaron ese domingo en la Catedral.

Como una forma de agradecer por todo lo que el Señor ha regalado a la diócesis de la Santa Cruz de Rancagua, y como signo de la Iglesia peregrina, a la celebración diocesana ingresaron en procesión fieles portando pendones de cada uno de los seis santuarios de la diócesis: la Purísima de Puquillay, Santa Rosa de Pelequén, San Expedito de Rosario, la Inmaculada Concepción de La Compañía, San Judas Tadeo de Malloa y Nuestra Señora de La Merced de Alcones. Mientras, se leía la Bula Apostólica de creación de la diócesis y se recordaba a los seis obispos que la han conducido. Los signos y rituales continuaron con el ingreso del árbol de la Cruz que fue dejado delante del presbiterio, seguido de fieles que portaban banderas de colores que representaban cada uno de los seis decanatos.

Una Iglesia agradecida

En su homilía, el obispo agradeció el testimonio de fe de tantos hombres y mujeres que dieron su vida al servicio del Evangelio y a los que continúan animándola e invitó a los presentes a renunciar al mal y a todo lo que va contra Dios.

Y para dar gracias, cada uno de los decanatos ofreció lo que es propio de su tierra: se presentó sal del mar y cochayuyo, artesanía de mimbre, pasteles y tortillas, cobre, fruta, útiles de aseo para las personas privadas de libertad y una estola antigua como signo sacerdotal.

La diócesis de Rancagua también quiso reconocer a quienes han aportado al desarrollo de la Iglesia diocesana desde su propio ámbito. Por eso, se entregó un galvano con la medalla de la Santa Cruz de Rancagua al periodista y director del diario El Rancagüino, Héctor González Valenzuela; y se reconoció a nueve sacerdotes eméritos y a dos de sus obispos eméritos: Javier Prado Aránguiz y Miguel Caviedes Medina. Cada uno recibió una estola con el signo de la cruz de los 90 años, en reconocimiento a su labor sacerdotal. En tanto, la Fundación Gaudí, representada por su presidente, Gonzalo Díaz, regaló a la diócesis un mosaico con la imagen de los 90 años.

La celebración concluyó en el atrio de la catedral con un homenaje musical que el conjunto Graneros, integrado por niños y dirigido por Miguel Gutiérrez, rindió a la diócesis de la Santa Cruz de Rancagua en sus 90 años.

LEYLA PONS. RANCAGUA


Separación Iglesia y Estado

Al promulgarse la nueva Constitución para Chile, en 1925, quedó establecida la separación entre la Iglesia y el Estado, lo cual fue ratificado en 1980 por la nueva Constitución emanada del Gobierno Militar.

En previsión de ese cambio, la Iglesia adoptó varios cambios en el país: un sistema de financiamiento desde el aporte de los fieles y la erección de siete nuevas diócesis, destacan entre ellos.

En el reciente mes de octubre celebran sus 90 años las diócesis de Valparaíso, San Felipe, Rancagua, Talca, Linares, Chillán y Temuco, erigidas por la Bula Apostólica Muneris Ratio del papa Pío XI, en 1925.

ROBERTO URBINA AVENDAÑO. SANTIAGO

 

Compartir