Editorial

La otra revolución que ha llegado a Cuba

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Editorial de la revista analizando el viaje a la Isla de Francisco

papa Francisco en papamóvil en las calles de Santiago de Cuba Viaje 19-22 septiembre 2015

EDITORIAL VIDA NUEVA | Francisco llegó a Cuba como algo más que un “peregrino de la misericordia”, lema oficial del viaje que le ha llevado a recorrer en tres días La Habana, Holguín y Santiago. Las fructíferas visitas pastorales de Juan Pablo II y Benedicto XVI se tradujeron en una mejora de las relaciones de la Santa Sede con los hermanos Castro y cierta libertad de acción para la Iglesia cubana. Sin embargo, la transición que algunos daban por hecho que ambos viajes acelerarían no ha llegado todavía hoy. Incluso hay quien ha perdido la esperanza en un cambio de régimen.

Con Francisco, el proceso ha sido a la inversa. El Papa argentino aterrizó en la Isla con los deberes hechos, tras ejercer de puente indispensable para acabar con el bloqueo de Estados Unidos y el restablecimiento de las relaciones entre ambos países. Nada se habría logrado sin la labor infatigable del cardenal Jaime Ortega y de la diplomacia vaticana durante décadas, que se ha visto impulsada por la mediación personal del Papa argentino, como ya reveló Vida Nueva.

Esta victoria de la cultura del encuentro no deja de ser un punto de partida. Los cubanos continúan sin ver garantizados sus derechos como ciudadanos, sin poder llegar a fin de mes, sin tener acceso a productos básicos, sin poder expresarse con libertad. En lo material, el embargo norteamericano resulta crucial y de ahí la petición de Francisco para que desaparezca. Sin embargo, el verdadero cambio solo llegará cuando la democracia se torne en realidad.

Así, la relevancia de esta visita radica tanto en el aliento dado por el Papa al pueblo cubano como en lo que se continúa cocinando en la recámara. Los disidentes han lamentado no haber podido encontrarse con Francisco y, una vez más, han sufrido la persecución cuando intentaron acercarse a él. La Iglesia no les da la espalda ni se muestra cómplice de los Castro por no haber tenido lugar un encuentro entre la oposición y el Papa. Prueba de ello es la implicación de la Iglesia cubana, tanto del clero nativo como de los misioneros, en acompañar y acoger en lo cotidiano a todos, sin pedir carné de partido o credo. Pero la experiencia de la Santa Sede en la relación con estados habla de los gratos resultados a medio plazo cuando se procede con guante blanco. Y así se está haciendo en Cuba.

Por eso, Francisco ha pulido cada discurso. En La Habana, frente a la gigantesca imagen del Che Guevara, afirmó que “el servicio nunca es ideológico, no se sirve a ideas, sino a personas”, y denunció la “dinámica de la exclusión” que genera servirse de los otros.

El segundo recado se lo envió a los jóvenes, cuando les invitó a “abrirse y soñar” con un futuro en común, huyendo de “los conventillos de las ideologías”.

En su despedida ante la Virgen de la Caridad del Cobre pronunció la palabra sagrada de la dictadura, otorgándole otro sentido: “Nuestra revolución pasa por la ternura”.

Esta es la otra revolución que Francisco ha llevado a Cuba: la de la fuerza de un pastor que conquista al pueblo, la eficacia de un diálogo en primera persona que derriba cualquier muro ideológico y la de la sutileza al moverse en un escenario geopolítico que todavía está por dar más frutos.

En el nº 2.957 de Vida Nueva. Del 26 de septiembre al 2 de octubre de 2015

 

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  • Francisco en Cuba, misionero del encuentro; por Antonio Pelayo, enviado especial
  • La santería, un cóctel de fe con resaca; por Darío Menor, enviado especial
  • ENTREVISTA: Emilio Aranguren, obispo de Holguín: “Francisco rogaba que los cubanos le bendijeran”; por Miguel Ángel Malavia
  • ENTREVISTA: Juan del Río, arzobispo castrense de España: “Cuba se tiene que abrir a Cuba”; por José Lorenzo
  • OPINIÓN: Dos desafíos: servicio a la persona y amistad social, por Dagoberto Valdés Hernández, director de la revista cubana Convivencia
  • OPINIÓN: Festín en tierra virgen, por Karel Becerra, secretario de Relaciones Internacionales de Cuba Independiente y Democrática (CID)

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