Viajes y Sínodo de la Familia marcarán el inicio del curso
ANTONIO PELAYO, corresponsal de Vida Nueva en ROMA | Desde la última crónica ha pasado poco más de un mes, caracterizado por una “sequía” informativa sin precedentes. Francisco ha dedicado estas semanas a su descanso y a preparar la intensísima agenda que le espera en los próximos meses.
Nos encontramos, en primer lugar, con su importante viaje a Cuba y Estados Unidos, que efectuará del 19 al 28 de septiembre. No es un viaje más en su agenda, sino uno de los más comprometidos y arriesgados del pontificado; sus discursos, tanto en La Habana como en Washington (será el primer pontífice romano que hable ante el Congreso norteamericano) y Nueva York (donde se dirigirá a la Asamblea General de la ONU), van a ser analizados con lupa por las cancillerías de todo el mundo; lo mismo que ocurrirá en sus encuentros con los hermanos Raúl y Fidel Castro, así como con Barack Obama.
Poco más de una semana después, dará comienzo en Roma la Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos sobre la Familia (del 4 al 25 de octubre), que está llamado a marcar la dirección de la Iglesia en la compleja problemática que hoy suscita la institución familiar y el matrimonio.
Analizando este acontecimiento, el historiador Alberto Melloni ha declarado lo siguiente a Giacomo Galeazzi, de Vatican Insider: “Bergoglio ha reactivado un mecanismo sinodal que no había funcionado nunca. Una transformación que aún no ha sido completada, pero el Papa ya ha obtenido una victoria indiscutible, porque, finalmente, durante el Sínodo se confrontarán posiciones diversas y habrá una verdadera discusión. En la mente de Francisco no existe una ruptura entre dos Iglesias diferentes. Para él, la Iglesia es una sola y el Sínodo el lugar donde se pueden confrontar posiciones lejanas entre sí”.
Antes de finalizar el año, le espera, del 25 al 30 de noviembre, un viaje a África, en la República Centroafricana primero y en Uganda después. Y el 8 de diciembre, la solemne apertura del Año Santo de la Misericordia. Nueve días después de este acontecimiento, el jueves 17, Jorge Mario Bergoglio cumplirá 79 años.
En el nº 2.952 de Vida Nueva
