Francisco a los reclusos en Palmasola: “Jesús quiere levantarnos siempre”

papa Francisco visita el centro de rehabilitación Santa Cruz-Palmasola en Bolivia 10 julio 2015

La visita al centro de rehabilitación, penúltimo acto del Papa en Bolivia

papa Francisco visita el centro de rehabilitación Santa Cruz-Palmasola en Bolivia 10 julio 2015

El Papa abraza a una de las internas, que rompió a llorar al dar su testimonio

MARÍA GÓMEZ | A las 9:30 hora local (15:30 hora española) de hoy viernes 10 de julio, el papa Francisco ha visitado la cárcel de Palmasola de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), un emocionante encuentro en el que el Pontífice ha escuchado los desgarradores testimonios de varios presos, quienes le han pedido que interceda por ellos y por sus derechos ante las autoridades estatales. “Es más fácil contratar a un juez corrupto que a un buen abogado”, ha denunciado Analía.

“Gracias a Dios existe una pastoral católica que nos da apoyo escolar y formativo”, ha agradecido, por su parte, Andrés, otro de los reclusos, quien ha relatado algunos de los abusos que se viven en el centro de rehabilitación: “Aquí tenemos grandes economistas, pues nos dan desayuno, comida y cena con seis bolivianos [78 céntimos de euros]. Ya imaginará qué clase de comida recibismo”.

Son solo dos de las muchas negligencias narradas. El Papa escuchó con interés los testimonios, que fueron interrumpidos continuamente por los aplausos del resto de internos, igual que lo hicieron con la intervención papal.

La fuerza de la oración

Francisco comenzó con fuerza: “El que está ante ustedes es un hombre perdonado. Un hombre que fue y es salvado de sus muchos pecados. Y así es como me presento”. Y luego añadió: “No tengo mucho más para darles u ofrecerles, pero lo que tengo y lo que amo, sí quiero compartirlo: Jesucristo, la misericordia del Padre”.

El Papa recomendó la oración como un factor que “sostiene de la desesperanza y nos estimula a seguir caminando. Una red que va sosteniendo la vida, la de ustedes y la de sus familias”.

Después les habló de Jesús, gracias al cual uno “comienza a mirar el presente de otra manera, con otra esperanza”. “Si en algún momentos estamos tristes, mal, bajoneados, les invito a mirar el rostro de Jesús crucificado. En su mirada, todos podemos encontrar espacio. Todos podemos poner junto a Él nuestras heridas, nuestros dolores, así como también nuestros pecados. En sus llagas, encuentran lugar nuestras llagas”.

“Jesús quiere levantarnos siempre. Esta certeza nos moviliza a trabajar por nuestra dignidad”, insistió.

En la línea de las denuncias que acaba de escuchar, el Papa citó problemas como “el hacinamiento, la lentitud de la justicia, la falta de terapias ocupacionales y de políticas de rehabilitación, la violencia…”. Pero, les dijo, “mientras se lucha por eso no podemos dar todo por perdido. Hay cosas que hoy ya podemos hacer”.

Así, les conminó a permanecer unidos: “No tengan miedo a ayudarse entre ustedes. El demonio busca la rivalidad, la división, los bandos. Luchen por salir adelante. En este Centro de Rehabilitación, la convivencia depende en parte de ustedes”.

Por último, el Papa quiso alentar también a los trabajadores del centro de rehabilitación, con una solicitud clara: “Tienen una importante tarea en este proceso de reinserción. Tarea de levantar y no rebajar; de dignificar y no humillar; de animar y no afligir. (…) Un proceso así vivido nos dignifica, anima y levanta a todos”.

Luego, Francisco invitó a guardar un momento de silencio rezando, “cada uno como sepa hacerlo…”; fueron unos breves segundos de recogimiento, tras los cuales el Papa les bendijo y terminó con su habitual “No se olviden de rezar por mí”.

Despedida de Bolivia y salida a Paraguay

Finalizada la visita a Palmasola, Francisco se encontraba con los obispos de Bolivia en la iglesia parroquial La Santa Cruz, donde, tras un saludo de bienvenida del presidente del Episcopado, Óscar Omar Aparicio Céspedes, arzobispo de Cochabamba, mantenían una reunión privada.

A las 12:45 h. (18:45 hora española), tendrá lugar en el aeropuerto internacional de Viru Viru la ceremonia de despedida de Bolivia. Desde ahí, el Papa volará a Paraguay. Según el programa previsto, el avión aterrizará en Asunción a las 15:00 hora local (21:00 hora española), donde habrá una ceremonia de bienvenida, y posteriormente Francisco será recibido por el presidente Horacio Cartes.

Programa completo del viaje

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