Juan José Omella: “Ustedes no están para servir a su partido”

El obispo recuerda a los políticos su obligación de atender al bien común

Juan José Omella, obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño, presenta la instrucción pastoral Iglesia servidora de los pobres CEE 27 abril 2015

El obispo Juan José Omella

JOSÉ LORENZO | El sufrimiento de la gente. Esa es la razón última que está detrás de la instrucción pastoral Iglesia, servidora de los pobres, aprobada por la Conferencia Episcopal Española (CEE) en la pasada plenaria de abril, y que el 15 de junio presentó su coordinador, Juan José Omella, en la Universidad Pontificia Comillas, de Madrid.

El obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño –que estuvo acompañado por el rector, Julio Martínez, y los profesores José Manuel Caamaño y José Manuel Aparicio– fue desglosando el articulado del documento, del que reconoció lo mucho que le debe a la Evangelii gaudium de Francisco, y cuya intención no es solo denunciar una lógica economicista que está dejando tantas víctimas, sino también arrojar luz sobre un futuro en donde “la primacía debe ser la persona, y no la economía”.

Para ello, invitó a “cambiar el foco” y apostar por “la defensa del bien común”. En este sentido, abogó por un Pacto Social contra la Pobreza y, al hilo de la recientes elecciones autonómicas y municipales, recordó a los que han resultado elegidos que ahora “ustedes no están para servir a sus partidos, sino a todos, al servicio del bien común”.

Omella también contó cómo surgió la idea de elaborar el documento. Aunque quiso recalcar que habían sido muchos los pastores que, en sus respectivas diócesis y a través de cartas pastorales, ya habían abordado el tema de la crisis económica y sus repercusiones en la gente, les llegaban también comentarios mostrando la extrañeza de que los obispos, “como Conferencia Episcopal, no dijesen nada”.

Así que, tras las elecciones episcopales de marzo de 2014, que llevaron de nuevo a la presidencia a Ricardo Blázquez y a él mismo a repetir al frente la Comisión Episcopal de Pastoral, propuso “inmediatamente” la idea de preparar un documento, a lo que el cardenal arzobispo de Valladolid le respondió: “Preséntalo”.

El obispo, en conversación con Vida Nueva, mostró su satisfacción por la buena acogida que está teniendo el texto. Su interés trasciende fronteras y los obispos portugueses han decidido que sea traducido para su reflexión, pues la problemática que aborda tiene exactamente los mismos efectos y víctimas en el país vecino.

En el nº 2.946 de Vida Nueva.

 

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