Jesús también habla la ‘fala’

El obispo de Coria-Cáceres, Francisco Cerro, presenta el Nuevo Testamento en fala, la lengua de 6.000 extremeños

El obispo Francisco Cerro durante la presentación de la ‘fala’

El obispo Francisco Cerro durante la presentación de la ‘fala’

JUAN CARLOS RODRÍGUEZ | “De fel u ben, nun temus que sansalmus nunca; ya chegará u día que arrecollamus u que hemus sembráu” (Gálatas 6,9). Hay unas 6.700 lenguas vivas en el mundo, y de ellas solamente unas 450 tienen traducida la Biblia al completo, unas 2.500 poseen partes de las Sagradas Escrituras. “Solo unas 3.200 tienen el Nuevo Testamento traducido, aún hay muchísimo que hacer”, según José Herrero Noguera, director de la Promotora Española de Linguística (Proel). Además de las traducciones de la Biblia al euskera, al catalán y al asturiano, Proel, junto a la Sociedad Bíblica Española, ha acabado de publicar una nueva traducción –en este caso, tan solo del Nuevo Testamento– a una lengua sorprendente, la fala, hablada en Extremadura, más concretamente al noroeste de Cáceres, en el Valle de Xálima.

“A fala es la denominación global admitida para nombrar las modalidades lingüísticas habladas en los municipios de Valverde del Fresno, Eljas y San Martín de Trevejo, que reciben respectivamente las designaciones en el habla local de valverdeiru, lagarteiru y mañegu”, según Antonio Viudas Camarasa, miembro de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes, autor del informe A fala, habla fronteriza con Portugal en la provincia de Cáceres, que defendió en 2001 su designación como Bien de Interés Cultural por la Junta de Extremadura.

Una lengua oral –una especie de galego del siglo XII– que solo hablan entre 6.000 extremeños. Y que, a partir de ahora, también podrán leer el Evangelio en esta peculiar lengua vernácula recogida en la Carta Europea de Lenguas Minoritarias. La fala es ya una de las 3.200 que disponen de esa traducción. La sexta entre las “lenguas” habladas en España, incluido el gallego, idioma en el que existe una versión del O novo testamento (Editorial Sept) desde 1980.

Novu testamento en fala

Novu testamento en fala

“Benaventuraus os que tenin fomi i sé de xusticia, porque elis serán saciaus” (Mateo 5,6). El obispo de la diócesis de Coria-Cáceres, monseñor Francisco Cerro, fue quien ofició el lunes 8 de junio en la parroquia de San Martín de Tours la eucaristía en la que se bendijo el Nuevu Evangeliu y donde, por primera vez, se leyó la Palabra de Dios en mañegu, que es el nombre que recibe la fala en San Martín de Trevejo.

En la homilía, el prelado afirmó que si los vecinos de San Martín, Eljas y Valverde se dirigen a sus padres a través de la fala, de una manera muy familiar y cariñosa, ¿por qué no hacer también lo mismo con Dios? “La Iglesia, quiere que nos acerquemos a Él desde nuestra cultura –explicó–, desde nuestros sentimientos más íntimos, porque así, es una manera de abrirle más nuestro corazón y sentir que lo más íntimo de nuestra vida lo ponemos en sus manos”.

Cerro destacó, además, la importancia del Concilio Vaticano II para la homogeneización de los textos bíblicos. En este sentido, desde hace 175 años, la Sociedad Bíblica de España, traduce los textos sagrados con el fin de que los cristianos de las distintas familias –protestantes, evangelistas o católicos– puedan leer e interpretar juntos la palabra de Dios. “Ha sido muy bien aceptado en la inauguración. La iglesia estaba llenísima y se han vendido todos los Nuevos Testamentos, es un éxito editorial”, señala José Herrero Noguera, director de Proel. “Pero sobre todo es un éxito a nivel espiritual –añade–, porque la gente lo lee. Incluso en la misa ya leían en su propia lengua. Tenemos que orar para que el Señor se muestre claramente y que la palabra corra y les lleve al conocimiento del Dios verdadero, a Jesús”.

“I tomó pan i dó gracias, i o partí i le dó, idendu: Esti é o mei corpu, que por vós é dau, fei istu en memoria miña” (Lucas 22,19). La traducción interconfesional del Nuevo Testamento al fala ha costado más de diez años de trabajo “por parte de un traductor católico, un traductor evangélico y un consultor de traducción y exégesis también evangélico”, según ha relatado José Luis Andavert, director general de la Sociedad Bíblica Española.

El traductor católico –y verdadero mentor– ha sido Domingo Frades Gaspar, de 78 años, vecino de San Martín de Trevejo, agricultor y la máxima autoridad en fala. “Gracias por todo, que el trabajo no es mío y el mérito viene de Dios”, le contestó al obispo el propio Frades, miembro correspondiente de la Real Academia Galega y autor de Vamus a falal. Notas pâ coñocel y platical en nosa fala (Editora Regional de Extremadura).

La idea del Nuevo Testamento en fala comenzó en 1994, “cuando hicimos un estudio sociolingüístico de las lenguas minoritarias en España y tuvimos a varios misioneros lingüistas recorriendo el país y viendo estas lenguas que han sobrevivido al español o al influjo del paso del tiempo”, según la narración de Herrero Noguera. “Entre los grupos que descubrimos estaba la fala, en el norte de Extremadura, que seguía viva entre tres pueblos de la sierra de Gata, con un uso cotidiano, aún a nivel institucional o cultural, aún religioso”, añade el director de Proel. Fue así como John Maurice Pearson y Roberta Lee Pearson dejaron California y se instalaron en San Martín de Trevejo hace diez años para ayudar a Domingo Frades con la tarea de traducir la Palabra de Dios al mañegu –forma dialectal de Frades y San Martín de Trevejo– “para enaltecerla”.

Bilingüismo extremeño

Señales en falaPara Herrero Noguera, la Sociedad Bíblica Española y Proel se plantearon entonces que traducir el Nuevo Testamento sería “un camino para divulgar la palabra de Dios entre los hablantes de esta lengua, haría que éste tuviera mucho uso y, además, daría una oportunidad buenísima para ayudar a fijar esta lengua”. La elaboración de una gramática y una ortografía es, desde hace años, el objetivo de la asociación cultural A Nosa Fala.

“Es una lengua que se ha transmitido oralmente de padres a hijos, y es ahora, varios siglos después, cuando se está trabajando en una norma gramatical y de escritura. Es necesario redactar una ortografía común y oficial”, según ha explicado a Efe el coordinador del Área de Comunicación de la asociación, Francisco José Antúnez.

Los 6.000 vecinos de Valverde del Fresno, Eljas y San Martín de Trevejo escriben en castellano, aunque hablan en fala, único caso de bilingüismo en Extremadura. Aunque en esta lengua “con rasgos del gallego-portugués, asturleonés, arcaísmos lingüísticos medievales y cierta castellanización”, según la describe Antonio Viudas Camarasa, están escritos los rótulos de las calles y se publican los bandos e instancias municipales. Sin embargo, tiene poco que ver con la cercana Portugal, y más con la lejana Galicia, a más de 350 kilómetros.

Orígenes galaico-portugueses y medievales

Los estudios realizados por Ramón Menéndez Pidal y Alonso Zamora Vicente, afirman que la fala es “una forma arcaica de galaico-portugués de la época medieval (siglos XII-XIII)”. No hay acuerdo, sin embargo, sobre sus orígenes y como ha llegado a nuestros días. El portugués Lendley Cintra piensa que la lengua fue introducida por colonos galaico-portugueses durante el primer periodo de reocupación tras la Reconquista y su posterior aislamiento. “Sin embargo otros niegan esta idea –señala José Herrero Noguera, director de Proel–, pues Valverde y Eljas pertenecían a la Orden de Alcántara y San Martín a la de San Juan, siendo Eljas y Valverde parte de la Real Audiencia de Cáceres en la provincia de Extremadura, mientras que San Martín pertenecía a la provincia de Salamanca y estaba bajo la jurisdicción de la cancillería de Valladolid. Valverde siempre perteneció a la diócesis de Coria, mientras que Eljas y San Martín hasta 1958 pertenecía a la de Ciudad Rodrigo”.

En el n1 2.946 de Vida Nueva.

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