Luces que brillan en la oscuridad

Cuando muchas mujeres pensaron que su vida inexorablemente estaría marcada por la prostitución y el estigma de tener que ganarse la vida en las calles, fueron invitadas a una vida nueva por parte de un grupo de personas sensibles a esta realidad de indignidad. Esta es la misión que realizan las Hermanas del Buen Pastor en la localidad Los Mártires desde hace 10 años, evangelizando, acompañando y acogiendo a las mujeres que ejercen prostitución en esta llamada Zona de Alto Impacto. La Red Misión, conformada por varias comunidades religiosas como las hermanas Adoratrices, Jesús de Kermaría, Oblatas del Santísimo Redentor y laicos, busca favorecer la futura integración de estas mujeres tanto a nivel familiar como social, rescatando sus capacidades, fortalezas y valores, con la finalidad de que puedan insertarse en la sociedad a través de la obtención de un trabajo digno que les permita tener un medio de subsistencia para lograr autonomía e independencia económica y personal. La experiencia del plan de formación integral que, con el apoyo de la Pontificia Universidad Javeriana, ha realizado la Red Misión nos hace soñar con una realidad diferente, en donde no se permita nunca más el comercio sexual y la degradación de las mujeres en la compra y venta de sus cuerpos y su dignidad fundamental. Ellas mismas testimonian su felicidad por el poder salir de una vida de angustia y degradación, que para nada puede ser denominada “trabajo”, a pesar de la forma en que algunos medios quieren presentar la prostitución. Un verdadero trabajo dignifica y hace que la persona busque la manera de progresar en él. Cuando es esclavitud y explotación no debe denominarse así. Este proyecto de formación de la Universidad es un paso gigante en este hacer posible el Reino de Dios entre nosotros.

Stella Rodríguez

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