Nombra a un comisario extraordinario y aparta a su fundador por acusaciones sobre su “conducta moral”
MIGUEL ÁNGEL MORENO | La Diócesis de Tui-Vigo anunció a través de un comunicado que la asociación de fieles Orden y Mandato de San Miguel Arcángel, radicada en Oia (Pontevedra), está siendo regida por un comisario extraordinario diocesano, al tiempo que el fundador, Feliciano Miguel Rosendo da Silva, del que penden “acusaciones en torno a su conducta moral”, fue apartado en abril de 2014.
La controversia sobre esta asociación de fieles, aprobada en 2009 y establecida en varios lugares de Galicia, además de en un pueblo de Madrid, se produce a partir de la denuncia ante la diócesis gallega de unas “supuestas irregularidades” cometidas por el fundador, así como por algunos miembros de la asocación, entre las que se incluyen supuestas prácticas sexuales con consagradas y comportamientos sectarios, según varios medios de comunicación.
Tras recibir la denuncia en diciembre de 2012, en mayo del siguiente año, el obispo Luis Quinteiro nombró a un visitador canónico, Manuel Salcidos, para investigar “el estado de vida y apostolado” de los miembros de esta organización, que llegó a tener 400 fieles, y que tenía su comunidad principal en una casa a las afueras de Oia.
Un año después, el obispo decide apartar a Rosendo de todas sus funciones después de que el informe del visitador revelara “supuestas acusaciones en torno a la conducta moral del fundador”. En marzo de 2014 se decide nombrar a un comisario extraordinario, José Vidal, con “funciones de presidencia y gobierno” y por un tiempo indefinido.
La decisión se da a conocer el 16 de abril de este año a los miembros de Orden y Mandato en asamblea extraordinaria, tras la cual se produce la baja de “un grupo significativo de miembros”, hasta el punto de que actualmente forman parte de la asociación una treintena de personas.
De los miembros actuales, 27 son ‘exploradores’ –el nombre que la asociación les confiere– radicados en la Diócesis de Tui-Vigo, y también hay cuatro ‘consagradas miguelianas’, que atienden una residencia de ancianos en la localidad de Bustarviejo, en la sierra de Madrid.
Vida Nueva se ha puesto en contacto con el comisario extraordinario, José Vidal, que ha rehusado hacer declaraciones al respecto. Tanto él como los miembros de la diócesis se remiten al comunicado de prensa publicado en su página web el pasado día 9.
Investiga la Guardia Civil
Fuentes de la Guardia Civil confirmaron a esta revista que la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Tui ha abierto una investigación recientemente sobre las actividades de esta asociación. Dos denuncias, una en el cuartel de Tui y otra en Collado-Villalba (Madrid), habrían motivado el inicio de esta investigación, según varios medios de comunicación.
Según informaciones del diario La Voz de Galicia, una investigación de un detective privado indica que el presidente de Orden y Mandato controlaba a los miembros de la asociación a nivel personal, económico o laboral. Otros medios, como el diario El Mundo, afirman que se produjeron prácticas sexuales entre Feliciano Miguel Rosendo y algunas de las consagradas de Orden y Mandato. El fundador pudo “valerse de su prevalencia y autoridad” respecto a otros miembros de la asociación de fieles, según informa la agencia Efe
Música religiosa, JMJ y ‘celebrities’
Orden y Mandato de San Miguel había sido conocida por su actividad en torno a la música religiosa. El grupo musical de la orden, fundado en 1994, tenía un estilo cercano al pop-rock y estaba formado por dos consagradas, las hermanas Sandra y Marta; varios laicos y un seminarista. Elaboraron dos discos: En camino a Santiago y Síguele, y participaron en la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid, en agosto de 2011, donde ofrecieron dos conciertos y actuaron en los momentos previos a la llegada del papa Benedicto XVI.
La asociación de fieles también se hizo conocida por la conversión a la vida religiosa de la actriz y modelo Olalla Oliveros, que continúa como consagrada en este grupo bajo el nombre de Olalla del Sí de María. Otro personaje famoso, Tamara Falcó, fue relacionada con Orden y Mandato, ya que pasó un fin de semana en la casa de este grupo en Pontevedra, pero no forma parte de la asociación, como ella misma aclaró recientemente.
En el nº 2.914 de Vida Nueva
