‘El anciano que saltó por la ventana y se largó’: la explosión del verano

El sueco Felix Herngren firma esta entretenida adaptación del best seller de su compatriota Jonas Jonasson

CINE1

JOSÉ LUIS CELADA | Un viejo y una maleta con 50 millones de coronas suecas son los principales protagonistas de esta atípica road movie que arranca cuando El anciano que saltó por la ventana y se largó del título decide no acudir a la fiesta de cumpleaños que le preparan por su centenario, en el geriátrico donde reside, y emprender una insólita aventura en cuya huida van quedando varios muertos por el camino. Un periplo aderezado por otras andanzas –a modo de recuerdos en off– que recrean sus asombros encuentros con personajes históricos de la talla de Stalin, Truman o Franco.

El sueco Felix Herngren adapta aquí el best seller de su compatriota Jonas Jonasson con apreciable fidelidad al original literario, aunque se vea obligado a simplificar subtramas y recortar personajes por los consabidos imperativos del lenguaje fílmico. Detalle menor, en cualquier caso, porque la cinta tampoco hubiera ganado en interés incorporando otros rostros y argumentos tomados del papel. Y es que su realización, tan práctica como plana, apaga las chispas de ingenio que salpican las páginas de la novela.

Aun con todo, el director escandinavo compone un retrato de su antihéroe capaz de despertar por igual la risa, la ternura y el desconcierto en el espectador. Hijo de padre con “talante revolucionario” y aficionado a los explosivos desde su más tierna infancia, nuestro hombre tendrá ocasión de ser testigo excepcional de episodios tan conocidos como la Guerra Civil Española, Mayo del 68 o la Guerra Fría. Ya sea en calidad de dinamitero, espía doble, experto en bombas o como simple compañero de correrías y borracheras, el caso es que el anciano ahora fugado vivió en otras épocas situaciones increíbles.

Es en este punto donde surgen las inevitables comparaciones con Forrest Gump (1994) y su proverbial habilidad para encontrarse siempre en el lugar y momento oportunos. Sin embargo, la candidez de aquel muchacho esforzado y de buen corazón se torna ahora ironía y desengaño, con una cantinela que atraviesa la narración: en la vida las cosas son como son y pasa lo que tiene que pasar; el arrepentimiento no sirve de nada, a menos que se tenga una máquina del tiempo; una cosa lleva a la otra, pero nunca se sabe si va a ser mejor que la anterior; las personas a menudo aparentan una cosa y luego resultan ser algo totalmente distinto… Mensajes que delatan el tono desenfadado y un punto ácido de esta película, una comedia ligera llamada a refrescar alguna sofocante tarde de verano.

Buscar en ella segundas lecturas o querer disfrutar de un humor inteligente es desconocer que El anciano que saltó por la ventana y se largó es un simple vehículo de entretenimiento sin mayores pretensiones. También el libro en el que se inspira, por mucho que la letra suela dignificar la imagen.

 

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: Hundraåringen som klev ut genom fönstret och försvann.

DIRECCIÓN: Felix Herngren.

GUIÓN: Felix Herngren y Hans Ingemansson, sobre la novela homónima de Jonas Jonasson.

FOTOGRAFÍA: Göran Hallberg.

MÚSICA: Matti Bye

PRODUCCIÓN: Malte Forsell, Felix Herngren, Henrik Jansson-Schweizer, Patrick Nebout.

INTÉRPRETES: Robert Gustafsson, Iwar Wiklander, David Wiberg, Mia Skäringer, Jens Hultén, Alan Ford, Sven Lönn, David Shackleton, Georg Nikoloff.

 
En el nº 2.903 de Vida Nueva

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