La Iglesia de Burundi reclama “sabiduría” para rebajar la tensión

Joachim Ntahondereye arzobispo de Muyinga Burundi

Los obispos burundeses piden prudencia a la hora de afrontar reformas de la Constitución

Joachim Ntahondereye arzobispo de Muyinga Burundi

Joachim Ntahondereye arzobispo de Muyinga.


La Iglesia de Burundi reclama “sabiduría” para rebajar la tensión [extracto]
 
JOSÉ LUIS CELADA | A finales del pasado mes de marzo, la Asamblea Nacional de Burundi rechazó el proyecto de reforma constitucional que habría permitido al presidente Pierre Nkurunziza presentarse a las elecciones de 2015 para una tercera legislatura. A pesar de la negativa del Parlamento, el mandatario amenaza ahora con convocar un referéndum que avale su propósito de ser reelegido.

Coincidiendo con el debate constitucional y el incremento de la tensión derivado del mismo, los obispos del pequeño país africano lanzaron un llamamiento a la calma, recomendando a las fuerzas políticas “sabiduría” y “acción concertada”. “Mejor tomar un largo camino que conduce a un destino que un atajo que termina en un callejón sin salida”, recordaban, en un comunicado emitido al acabar una reunión del Episcopado, citando un proverbio local. “Una Constitución adoptada sin diálogo ni consenso –advertían– podría poner en peligro el proceso de paz y reconciliación”.

La Constitución se basa en los Acuerdos de Arusha (1994), que pusieron fin a una década de guerra civil, introduciendo el principio de cuotas étnicas en el reparto del poder. “Estas y otras disposiciones similares siguen siendo necesarias –dicen los prelados–, porque los problemas para los que se ofrecen soluciones, como la monopolización del poder por parte de un solo grupo, la exclusión por motivos étnicos o políticos, el cumplimiento de los mandatos políticos, no se han resuelto completamente”.

Por todo ello, los obispos entienden que no es apropiado “reformar la Constitución en el clima político actual bastante caldeado, que no es propicio para un diálogo pacífico sobre cuestiones importantes y sensibles”, y que es “prudente revisar únicamente los pasos necesarios para mejorar la ley electoral y permitir la adhesión del país a la Comunidad del África del Este”.

En el nº 2.889 de Vida Nueva

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